Philip Thomas, profesor de gestión de riesgos en la Universidad de Bristol, académico que predijo con precisión las etapas de la pandemia hasta el momento, según recoge Daily Mail, ha lanzado un mensaje de esperanza para Reino Unido. Según sus estudios, no habrá una tercera ola devastadora de muertes por covid
Gran Bretaña regresa a una sensación de cierta normalidad. A medida que las tiendas y los bares vuelven a abrir, y las familias se reúnen, la larga prueba del confinamiento parece estar llegando a su fin. Según Thomas, dadas las tendencias positivas actuales, "el objetivo del Gobierno de establecer libertad total para el 21 de junio parece que debería cumplirse".
Sin embargo, añade el profesor Thomas, son muchos los expertos que arrojan pesimismo y que advierten que el levantamiento de las restricciones podría hundir al país en otra crisis de salud. La semana pasada, el profesor Jeremy Brown, miembro del Comité Conjunto de Vacunación e Inmunización (JCVI), explicó en BBC que "una gran tercera ola podría terminar con 30.000 a 50.000 muertes, potencialmente, si fuera de un tamaño similar a las olas anteriores".
En la misma línea, a principios de mes, el Grupo Asesor Científico para Emergencias (Sage), cuyo modelo ha proporcionado la base para la dura política de confinamiento, advirtió que es "muy probable" que Reino Unido sufra una tercera ola, mientras que cualquier intento de volver a la vida como estaba en febrero de 2020 probablemente resultaría en "una gran epidemia".
Esta circunstancia se ha visto agravada por los temores sobre la llegada de variantes más infecciosas del virus, como el nuevo tipo B.1.617 de la India, cuya propagación por el subcontinente acaba de obligar al primer ministro británico a cancelar su próxima visita.
Para el profesor Thomas, esta negatividad "es exagerada". "Hay poca evidencia convincente para respaldar la afirmación de que, a medida que se alivie el bloqueo, Gran Bretaña está a punto de ser golpeada por una tercera ola, acompañada por un nuevo aumento en las muertes", explica el profesor de la Universidad de Bristol.
"Por el contrario, en mi opinión, si efectivamente hay un aumento de las infecciones en los próximos meses, tendrá un impacto poco significativo y el número de muertos seguirá siendo extremadamente bajo. Eso se debe al gran éxito del programa de vacunas, lo que significará que para junio, la inmensa mayoría de la población estará protegida", añade el docente.
"La realidad es que estamos venciendo a la pandemia. A medida que nos adentramos en el verano, la inmunidad aumentará. En tales circunstancias, no habría ninguna justificación para mantener en vigor medidas restrictivas", subraya el profesor Thomas.
Este optimismo se basa, en parte, en el modelo matemático que ha creado, que utiliza datos para proyectar la trayectoria del virus. Esto se prueba con mediciones independientes realizadas por la Oficina de Estadísticas Nacionales (ONS, por sus siglas en inglés).
Al estudiar el coronavirus, el profesor Thomas desarrolló un modelo llamado Predictor Corrector Coronavirus Filter (PCCF). Un dispositivo de software simple, inspirado en el trabajo de dos escoceses pioneros, el epidemiólogo matemático Anderson McKendrick y el bioquímico William Kermack, quienes propusieron una hipótesis que podría rastrear la propagación de una enfermedad infecciosa.
Como todos los modelos, el PCCF tenía una serie de supuestos incorporados, incluidos altos niveles tanto de aceptación como de efectividad de las vacunas, basados en datos de campo. "Lo que indica el modelo PCCF es que hay poco peligro de que nuestra sociedad se vea abrumada por una tercera ola", precisa el profesor Thomas. "Mi predicción es que, aunque el número total de infecciones activas en Inglaterra podría alcanzar un pico de 160.000 a principios de otoño de este año, este aumento no dará lugar a un aumento en las muertes u hospitalizaciones. Esto se debe a que, gracias a las vacunas, se ha roto el vínculo entre las infecciones por covid y las muertes", añade.
"En este entorno nuevo y más seguro, aproximadamente un tercio de las personas infectadas no presentarán ningún síntoma, mientras que la gran mayoría del resto solo presentará síntomas leves. Como resultado, incluso cuando se alcance el pico, el número de muertos probablemente será inferior a 20 por día", detalla.
El especialista, por tanto, se pregunta por qué hay tantos expertos pesimistas. "Creo que es porque están obsesionados con el objetivo de erradicar covid, sin importar el costo social y económico, por lo que ven cualquier medida de libertad como una amenaza potencial. Pero este enfoque carece de sentido de perspectiva. No toma en cuenta el enorme daño colateral causado por los bloqueos, incluida la mala salud física y mental, la inseguridad financiera, las fallas comerciales y el desempleo", señala.
"Hemos acumulado problemas colosales para el futuro. Los últimos vestigios del confinamiento no deberían prolongarse ni un momento más de lo previsto en la hoja de ruta del Gobierno. Y mi modelo muestra que no será necesario. Eso es motivo de celebración, no de ansiedad", concluye.