Reino Unido se enfrenta hoy a unas elecciones consideradas como las más importantes del último siglo. Al menos así las anuncian los partidos políticos en un intento de movilizar a los británicos. Los conservadores de Boris Jonhson parten como favoritos, pero necesitan mayoría absoluta para poner en marcha su plan del Brexit y romper con Europa.
A las siete de la mañana han abierto los colegios electorales en el Reino Unido. Por delante, una jornada muy larga, hasta las 10 de la noche tienen los 46 millones de británicos para depositar su voto.
Son las elecciones más decisivas que se recuerdan, las terceras en cuatro años y medio, en las que Boris Johnson busca apuntalar el Brexit.
En las últimas horas el nerviosismo se ha apoderado del Partido Conservador. A pesar de liderar las encuestas, han visto reducida su ventaja sobre los laboristas a 28 escaños, lejos de la mayoría absoluta que necesitan para cumplir con su promesa de salir de la Unión Europea el 31 de enero.
Johnson ha querido evitar a toda costa cualquier error. Una muestra es la huida del primer ministro británico a la desesperada, escondiéndose en una cámara frigorífica para no responder a las preguntas de un periodista. "Yo no necesito esconderme en un frigorífico cuando alguien me hace una pregunta”, sentenció Jeremy Corbyn.
El debate abierto sobre la seguridad social británica ha beneficiado a Jeremy Corbyn, tras el escándalo del niño de cuatro años con neumonía durmiendo en el suelo de urgencias de un hospital británico.
En el último día de campaña, los dos candidatos se han lanzado a por el voto de los indecisos frente a un panorama electoral incierto donde no se descarta que salga otro Parlamento fragmentado.