La reconstrucción de Notre Dame abre un debate entre los expertos: ¿recuperarla o renovarla?

telecinco.es 17/04/2019 14:28

Cinco años es el plazo que se ha dado el presidente de Francia, Emmanuel Macron, para culminar la reconstrucción de la catedral de Notre Dame que este lunes fue pasto de las llamas. Un plazo que para muchos se antoja escaso dado la magnitud de los destrozos causados por el fuego y por la incertidumbre sobre el modelo a seguir.

A pesar de la promesa presidencial, los expertos creen que el plazo para ver la nueva Notre Dame estará más cerca de los 20 años dado que se trata de un complejo proceso de licitaciones públicas con sus plazos estrictamente reglados.

En este caso no parece que los fondos para financiar los trabajos sean un problema. La lluvia de ofertas millonarias podría ser suficiente para pagar el costoso proceso de reconstrucción, una tarea a la que Francia ya ha convocado a todos los europeos y resto de ciudadanos del mundo para que participen en una conferencia internacional de donantes. La Unesco ya estudia su participación en las tareas y la comunidad internacional con el presidente de Estados Unidos, Donald Trump han comprometido su colaboración.

Ahora queda por decidir qué Notre Dame se quiere reconstruir, si un templo a imagen y semejanza del que conocíamos o una nueva catedral que recuerde sus orígenes pero con nuevos elementos arquitectónicos y decorativos. La polémica está servida aunque, a pesar de todo, sí hay un acuerdo básico y es que lo más urgente es levantar una cubierta provisional que proteja al templo de las inclemencias durante todos este proceso.

Aunque la caída de la aguja central envuelta en llamas supuso un choque para toda Europa y la cristiandad, se trata del elemento más fácil de reconstruir. En este aspecto, los expertos no tienen dudas ya que su última recuperación data del siglo XIX. La importancia de su presencia en el nuevo templo es tal que el Gobierno francés se ha apresurado para convocar un concurso internacional que aporte ideas para su diseño.

Otra cosa son los trabajos en la parte más afectada por las llamas: la cubierta de las dos naves del templo, la principal y el transepto.

Las imágenes del fuego devorando casi por completo la cubierta de la catedral han desolado a todo el mundo y han dado una medida exacta de la magnitud de la destrucción. Por ello, los expertos, tienen más dudas sobre el proceso y el modelo a seguir.

En primer lugar habrá que proceder a sanear toda la estructura para determinar qué elementos son susceptibles de recuperar y cuáles habrán de ser eliminados. Mientras se trabaja en la protección de los restos útiles, se abre el debate sobré cómo actuar. Las opiniones mayoritarias apuestan por una rehabilitación escrupulosa con la historia de Notre Dame utilizando los mismos materiales que ahora han sido destruidos, es el caso de la madera.

El mayor problema ahora es la recuperación de las armaduras que cubrían la nave central, el crucero y el transepto. Hay que tener en cuenta que, precisamente esta es la zona que fue recuperada en el siglo XIX por Eugène Viollet-le-Duc por lo que aquí es dónde los expertos dudan más en la forma de proceder: respetando lo existente o introduciendo criterios del siglo XXI.

Muchas de las técnicas y materiales presentes en las zonas destruidas por el fuego ya no tienen sentido en la actualidad, además, la historia de un monumento como Notre Dame es la suma de siglos de historia, procesos y técnicas que han ido sumando hasta conformarlo como lo hemos conocido. Por eso los expertos apuestan también por la dualidad de los tradicional con lo nuevo peo sin restarle identidad al monumento.