EEUU ha dejado al mundo abochornado, incrédulo, con miedo. La democracia más fuerte del mundo ha visto cómo una turba asaltaba su Capitolio alentada por el presidente de los EEUU. Un Capitolio que volverá a ponerse en marcha y aceptará a Biden como presidente, pero que ha visto cómo la imagen de la democracia, con asaltantes con los pies encima de la mesa de Pelosi, tercera autoridad del Estado, ha quedado señalada.
Que Maduro te de lecciones de transición pacífica y democracia debe doler. El desgarro y descrédito de la democracia americana es insólito. Y no ha venido de una ataque externo sino interno en una sociedad reflejo de muchas, sin ir más lejos, la española, polarizada hasta el extremo.
Todo comenzaba cuando manifestantes a favor del presidente de Estados Unidos, Donald Trump, retiraban las vallas que rodeaban el Capitolio -ahora ya asegurado- y lograban ingresar en el edificio, en plena sesión de ambas cámaras del Congreso para certificar la victoria del candidato demócrata, Joe Biden, en las elecciones del 3 de noviembre. Los manifestantes, que llamaban "traidores" a los agentes, han atravesado el perímetro del Capitolio momentos después de que haya comenzado la sesión conjunta del Congreso. Algunos de ellos se han enfrentado a la Policía, mientras que varios agentes han hecho uso de gas pimienta para intentar dispersar a la multitud. En el asalto ha muerto, al menos, una mujer por una herida de bala.
El expresidente de Estados Unidos Barack Obama ha manifestado que "la historia recordará" la violencia ocurrida esta víspera en el Capitolio perpetrada por simpatizantes del presidente, Donald Trump, a quien ha acusado de originar la incursión con sus "mentiras sin fundamento".
"La historia recordará con justicia la violencia ocurrida en el Capitolio, incitada por un presidente en funciones que ha seguido mintiendo sin fundamento sobre el resultado de una elección legítima, como un momento de gran deshonor y vergüenza para nuestra nación".
"Desde hace dos meses, un partido político y su correspondiente ecosistema de medios de comunicación", ha proseguido Obama, en referencia a cadenas como Fox News o la OANN, altavoces del presidente o, en ocasiones, guías de su política, "se han mostrado sin voluntad alguna de contar a sus seguidores la verdad: que estas elecciones no han sido ajustadas".
"Esta narrativa de fantasía se ha escapado cada vez más fuera de la realidad y ahora estamos viendo las consecuencias", ha añadido.
"Ahora mismo, los líderes republicanos se enfrentan a una decisión en estas profanadas cámaras de la democracia. O siguen así, y alimentan el fuego, o pueden escoger la realidad y dar los primeros pasos para extinguirlos. Pueden elegir América", ha manifestado.
"Nos toca a todos, como americanos, apoyar al presidente electo Joe Biden en el objetivo de restaurar el propósito común de nuestras políticas", ha concluido.
El expresidente de Estados Unidos Bill Clinton ha señalado directamente al actual jefe de la Casa Blanca, Donald Trump, y a "sus más ardientes asistentes" como responsables del asalto al Capitolio en Washington, al intentar durante las últimas semanas anular los resultados de las elecciones.
"El asalto fue alimentado por más de cuatro años de políticas venenosas que difundieron información errónea deliberada, sembraron desconfianza en nuestro sistema y enfrentaron a los estadounidenses entre sí", ha escrito Clinton en su cuenta de Twitter.
"La cerilla ha sido encendida por Donald Trump y sus más ardientes asistentes, incluidos muchos en el Congreso, para anular los resultados de unas elecciones que perdió", ha señalado.
"La elección fue libre, el recuento fue justo, el resultado es definitivo. Debemos completar la transferencia pacífica del poder que exige nuestra Constitución", ha enfatizado, animando a los estadounidenses a "pasar página y avanzar juntos", "honrando" la Constitución.
Por su parte, la que fuera primera dama y exsecretaria de Estado durante la Administración de Barack Obama, Hillary Clinton, ha calificado de "terroristas domésticos" a la turba que "atacó" lo "más sagrado" de la Constitución de Estados Unidos, "la transferencia pacífica del poder después de elecciones libres".
"Debemos restablecer el Estado de derecho y hacerles responsables. La democracia es frágil. Nuestros líderes deben estar a la altura de su responsabilidad de protegerlo", ha enfatizado.
El expresidente de Estados Unidos George W. Bush ha calificado de "enfermizo y desgarrador" el asalto del Capitolio por parte de los afines del presidente, Donald Trump, y lo ha considerado propio de una "república bananera". Nada menos. "Estoy consternado por el comportamiento imprudente de algunos líderes políticos desde las elecciones y por la falta de respeto mostrado hoy por nuestras instituciones, nuestras tradiciones y nuestra aplicación de la ley", ha expresado el expresidente a través de un comunicado. "Es una visión enfermiza y desgarradora. Así es como los resultados de las elecciones se resuelven en una república bananera, no en nuestra democracia", ha señalado.
El expresidente republicano ha explicado que este "violento asalto al Capitolio" ha sido llevado a cabo por personas "cuyas pasiones han sido inflamadas por falsedades y falsas esperanzas" y ha lamentado que pueda "dañar" la imagen y la "reputación" de Estados Unidos.
"En Estados Unidos es responsabilidad fundamental de cada ciudadano patriota defender el orden y la ley. Para aquellos descontentos con los resultados de las elecciones, nuestro país es más importante que los políticos de cada momento", ha aseverado. "Dejemos que los funcionarios electos cumplan con sus responsabilidades y representen nuestras voces en paz y con seguridad", ha concluido Bush.
El fiscal general en funciones de Estados Unidos, Jeffrey Rosen, ha condenado el asalto de este miércoles contra el Congreso de Estados Unidos en plena sesión de certificación de los resultados de las elecciones presidenciales de noviembre.
"La violencia contra el Edificio del Capitolio Nacional es un ataque intolerable contra una institución fundamental de nuestra democracia", ha afirmado Rosen en un comunicado.
El secretario de Estado, Mike Pompeo, ha cargado contra los "inaceptables" incidentes. "El asalto de hoy al Capitolio es inaceptable. La ilegalidad y los disturbios, aquí y en cualquier parte del mundo, son siempre inaceptables", ha indicado Pompeo a través de Twitter. "He viajado a muchos países y siempre he defendido el derecho de todo ser humano a protestar pacíficamente por sus creencias y sus causas", ha añadido.
Varios líderes internacionales han condenado este miércoles el asalto al Capitolio de Estados Unidos, subrayando su compromiso con la "democracia" y una transición "pacífica" de poderes entre administraciones.
El primer ministro británico, Boris Johnson, ha tildado lo ocurrido de "vergonzoso". "Escenas vergonzosas en el Congreso de Estados Unidos", ha señalado a través de un mensaje publicado en su cuenta de la red social Twitter, donde ha remarcado que el país norteamericano "defiende la democracia en todo el mundo" y "ahora es vital que haya una transferencia de poder pacífica y ordenada".
Por su parte, el ministro de Exteriores de Alemania, Heiko Maas, ha considerado que el presidente estadounidense, Donald Trump, y sus seguidores "deben aceptar finalmente la decisión de los votantes estadounidenses y dejar de pisotear la democracia".
Desde Francia, el ministro de Exteriores, Jean Yves Le Drian, que ha condenado lo ocurrido, ha considerado que "los violentos actos" contra las instituciones estadounidenses "son un grave ataque contra la democracia". "La voluntad y el voto de las estadounidenses debe respetarse", ha remachado en un mensaje publicado en la citada red social.
Mientras, el primer ministro de Italia, Giuseppe Conte, ha asegurado seguir el desarrollo de la situación "con gran preocupación". "La violencia es incompatible con el ejercicio de los derechos democráticos y las libertades", ha añadido, mostrando su "confianza" en la "fortaleza y robustez" de las instituciones estadounidenses.
La primera ministra de Noruega, Erna Solberg, ha calificado de "increíbles" las imágenes llegadas desde Washington y ha aseverado que el asalto al Capitolio es un "inaceptable ataque a la democracia". "Sobre el presidente Trump reposa la gran responsabilidad de parar esto", ha zanjado.
También la ministra principal de Escocia, Nicola Sturgeon, ha señalado que lo ocurrido en el edificio, que alberga ambas cámaras del Congreso de Estados Unidos, es "absolutamente horrible", antes de expresar su "solidaridad" con los estadounidenses "que están del lado de la democracia y el traspaso pacífico y constitucional del poder". "Vergüenza para quienes han incitado este ataque a la democracia", ha remachado.
El presidente chileno, Sebastián Piñera, ha afirmado que Chile "rechaza las acciones destinadas a alterar el proceso democrático" en Estados Unidos, al tiempo que ha condenado la "violencia" y la "indebida interferencia con las instituciones constitucionales". Así, ha añadido que "confía en la solidez de la democracia estadounidense para garantizar el imperio de la ley y estado de derecho".
Asimismo, el presidente colombiano, Iván Duque, se ha expresado en la misma línea que Piñera y ha señalado que Colombia tiene "plena confianza" en la "solidez" de las instituciones del país norteamericano, "así como en los valores del respeto por la democracia y el imperio de la ley compartidos por nuestros países desde el inicio de nuestra vida republicana". "Rechazamos los actos de violencia presentados el día de hoy durante el acto de recuente del voto del colegio electoral en el Congreso de Estados Unidos", ha añadido, manifestando su "solidaridad y respaldo" a los miembros del Congreso y las instituciones de la nación norteamericana.
En Venezuela, el Ejecutivo de Nicolás Maduro ha difundido un comunicado en el que ha expresado su "preocupación" por lo ocurrido, antes de condenar la "polarización política y la espiral de violencia que no hace sino reflejar la profunda crisis por la que actualmente atraviesa el sistema político y social" de Estados Unidos. "Con este lamentable episodio, Estados Unidos padece lo mismo que han generado en otros países con sus políticas de agresión", ha argüido, asegurando que el país caribeño espera que "en breve cesen los hechos de violencia y el pueblo estadounidense pueda finalmente abrirse un nuevo camino hacia la estabilidad y la justicia social".
Desde Argentina, el presidente, Alberto Fernández, ha manifestado su "repudio" a los "graves hechos de violencia y el atropello al Congreso" de la nación norteamericana. En este contexto, ha trasladado la confianza del país latinoamericano en una "transición pacífica" de poder presidencial que "respete la voluntad popular". Del mismo modo, ha expresado el "más firme respaldo" de Argentina al presidente electo, Joe Biden.
El presidente de la Cámara de Diputados de Brasil, Rodrigo Maia, ha calificado el asalto de "invasión" y ha señalado que representa un "acto de desesperación por parte de una cadena antidemocrática que perdió las elecciones". "Cada vez es más claro que el único camino es la democracia, con diálogo y respetando la Constitución", ha dicho en Twitter.
Además, el presidente de Ecuador, Lenín Moreno, ha rechazado "los actos de violencia" cometidos en Washington y ha considerado que "debe respetarse el Estado de Derecho tradicional de Estados Unidos, la institucionalidad y las garantías al debido proceso". "En democracia, el reconocimiento de la voluntad de los ciudadanos es imperativo", ha continuado.
Entretanto, Costa Rica ha señalado que "sigue de cerca" los acontecimientos en Washington. En una serie de mensajes publicados en la cuenta de la citada red social del Ministerio de Exteriores, el Ejecutivo costarricense ha trasladado que "confía en la solidez histórica de la institucionalidad democrática de Estados Unidos, así como en el profundo sentimiento de respeto por el Estado de Derecho". "Costa Rica reitera su condena a todo acto de violencia que interfiera con el sano desarrollo del sistema democrático", ha agregado.
Además, la Comisión Interamericana de Derechos Humanos (CIDH) ha condenado "enérgicamente" los "actos de violencia" registrados en el Capitolio. De forma paralela, ha urgido al Estado a "restablecer la seguridad y el funcionamiento parlamentario", así como a "investigar rigurosamente los hechos y a las personas que han incitado la violencia y los ataques contra instituciones democráticas, castigando a los responsables y garantizando que no se repetirán".
"La CIDH pide a los involucrados que eviten usar la violencia y usen los canales institucionales para sus demandas", ha continuado, urgiendo a los líderes estadounidenses y a los líderes de las protestas a "respetar los procesos e instituciones democráticas".
Por su lado, la Organización de Estados Americanos (OEA) ha "condenado" y "repudiado" lo que ha tildado de "atentado contra las instituciones". "El ejercicio de la fuerza y el vandalismo contra las instituciones constituye un grave ataque contra el funcionamiento democrático", ha indicado en un comunicado.
Así, la OEA ha exhortado a "recuperar la necesaria racionalidad y a cerrar el proceso electoral conforme a la Constitución y a los procedimientos institucionales correspondientes". "La democracia tiene su pilar fundamental en la independencia de los poderes del estado, los cuales deben actuar completamente libres de presión", ha zanjado.
La Unión Europea ha denunciado el "asalto a la democracia" en Estados Unidos vivido este miércoles en Washington, donde manifestantes partidarios de Donald Trump han entrado en el Capitolio, parando la sesión que certificaba la victoria electoral de Joe Biden, y ha reclamado que se respete el resultado de los comicios de noviembre.
"A ojos del mundo, la democracia estadounidense parece estar asediada. Esto es un asalto sin precedentes a la democracia, las instituciones y el Estado de Derecho en Estados Unidos", ha asegurado el Alto Representante de la UE para Política Exterior, Josep Borrell, en un mensaje en redes sociales.
En este sentido, ha pedido que se respete el resultado de las elecciones presidenciales del pasado 3 de noviembre y ha aplaudido las palabras del presidente electo, quien ha reclamado a Trump que diera un paso adelante y defendiera la Constitución frente a los disturbios en Washington. "Esto no es Estados Unidos. La fortaleza de su democracia prevalecerá frente al extremismo", ha indicado Borrell.
También en la capital comunitaria, el presidente del Consejo, Charles Michel, ha mostrado su conmoción con las noticias que llegan de Estados Unidos y ha confiado en que el país pueda garantizar una transición de poder "pacífica". "El Congreso de Estados Unidos es un templo de la democracia", ha afirmado Michel, ante el asalto protagonizado por los seguidores de Trump.
Por su lado, el presidente del Parlamento Europeo, David Sassoli, ha expresado su "profunda preocupación" por los disturbios registrados en el Capitolio. "El voto democrático debe respetarse. Estamos seguros de que Estados Unidos garantizará que las reglas de la democracia son protegidas", ha apuntado el socialista italiano.
El presidente del Gobierno, Pedro Sánchez, ha mostrado su confianza en "la fortaleza" de la democracia de EE.UU. y en que la nueva presidencia de Joe Biden "superará la etapa de crispación, mientras que el vicepresidente segundo del Gobierno y líder de Unidas Podemos, Pablo Iglesias, ha asegurado que los acontecimientos en Estados Unidos muestran el modo de actuación de la ultraderecha, "la mentira descarada como arma política y el intento de subversión de los mecanismos institucionales cuando no le son favorables. Frente a su violencia y sus mentiras allí y aquí: democracia y antifascismo", ha escrito Iglesias en su cuenta de Twitter tras el asalto al Capitolio en Washington..
El presidente del PP, Pablo Casado, ha calificado de "inaceptable" el asalto al Capitolio en Washington y ha subrayado su confianza en que Joe Biden superará la "crisis institucional" que sufre Estados Unidos y que Donald Trump "debe atajar". "La democracia se basa en la representación parlamentaria que no puede ser coaccionada. Es lamentable que una gran Nación como EEUU sufra esta crisis institucional que debe atajar el Presidente saliente y confío superará el Presidente electo", ha escrito Pablo Casado en su cuenta de Twitter.
El presidente de Vox, Santiago Abascal, ha afirmado que le extraña que "a la izquierda progre le parezca tan mal el asalto al Capitolio" de Estados Unidos. Aquí tenemos a un vicepresidente que llamaba a asaltar el Congreso. Aquí tenemos a una Generalidad gobernada por los que asaltaron el parlamento catalán", ha indicado.y ha deseado que "se restaure el orden que nunca debió verse perturbado de esta forma. La situación en EEUU es extremadamente grave desde hace meses", ha escrito Abascal en su cuenta de Twitter, en la que ha publicado varios mensajes sobre los acontecimientos en Washington. "El país se haya terriblemente dividido, y esa es una noticia trágica para la democracia y la libertad en todo el mundo", ha subrayado Abascal, que resalta que ahora se entra "en un territorio inexplorado".
El presidente de Vox ha afirmado que "quizá lo que les molesta a los comunistas y socialistas es que en otros países las izquierdas hayan perdido el monopolio de la violencia. Nosotros la hemos condenado siempre, venga de donde venga. Y todavía hoy la sufrimos a diario, instigada desde el gobierno y sus satélites", ha afirmado. "La izquierda lleva años dinamitando instituciones, controlando medios y amparando la violencia en todo occidente. Las consecuencias las sufrimos todos", señala.
Por último, ha indicado que las democracias de occidente "tienen que demostrar su fuerza frente a los procesos revolucionarios que estúpidamente han promovido las elites", y pide pensar en España "fundamentalmente" porque en pocas semanas se celebrarán elecciones en Cataluña. "Por eso hoy es un momento para reiterar nuestra exigencia a todas las fuerzas políticas para que se comprometan a respetar los actos electorales, la democracia y la convivencia. Que los violentos se queden solos y comparezcan ante los tribunales. Y que no estén en gobiernos como ocurre en nuestro país", ha conclui
La presidenta de Ciudadanos, Inés Arrimadas, ha calificado de "muy preocupantes" las noticias del asalto al Capitolio de Estados Unidos y ha subrayado el daño que hace el populismo. "Un grupo de radicales intenta alterar el orden constitucional y democrático por la fuerza. Cuánto daño hace y qué peligroso es el populismo", ha escrito Arrimadas en su cuenta de Twitter.