Países Bajos ha anunciado que suspende temporalmente el uso de la vacuna AstraZeneca contra el coronavirus. Ya son más de una decena los países que han paralizado la inoculación del fármaco por posibles reacciones adversas como la aparición de trombos. Lo mismo ha decidido Irlanda, donde unas 30.000 personas no serán vacunas esta semana con el preparado de AstraZeneca, al detectarse cuatro nuevos casos de coágulos sanguíneos en Noruega. La OMS insiste en que "no hay razón para no usar esa vacuna." Por el momento, en España seguirá administrándola aunque algunas CCAA han decidido dejar de ponerla temporalmente.
Por precaución y después de que la Agencia Neerlandesa de Medicamentos haya recogido varios casos de trombosis, Países Bajos ha decidido suspender temporalmente el suministro de la vacuna de AstraZeneca.
El Ministerio de Salud en un comunicado señala que "basándose en la nueva información, la Autoridad Holandesa del Medicamento ha recomendado suspender el uso de la vacuna de AstraZeneca como precaución".
Esta paralización tendrá vigencia hasta el próximo 18 de marzo, mientras se espera una investigación de los posibles efectos secundarios de la vacuna. Hasta 43.000 personas esperaban la administración de esta vacuna, según medios holandeses.
"No debe haber ninguna duda sobre las vacunas. Creo que es muy importante que los informes (de efectos secundarios) se investiguen adecuadamente. Siempre debemos pecar de cautelosos, por lo que es aconsejable presionar el botón de pausa ahora como medida de precaución. Confío completamente en nuestros expertos para esto", ha añadido el ministro de Salud, Hugo de Jonge.
Países Bajos ha sido el último en sumarse. Con él son ya trece países europeos los que han paralizado la inmunización con el fármaco de Oxford o retirado lotes específicos.
El Gobierno irlandés también ha confirmado que unas 30.000 personas no serán vacunas esta semana con el preparado de AstraZeneca, después de suspender temporalmente su administración al detectarse cuatro nuevos casos de coágulos sanguíneos en Noruega.
El ministro de Sanidad, Stephen Donnelly, ha asegurado que los afectados recibirán una "nueva cita" para vacunarse y subrayó que este retraso no "tendrá impacto alguno" sobre el calendario previsto.
La decisión del Gobierno de Dublín, agregó, sigue la recomendación de la Comisión nacional de asesoramiento de inmunización (NIAC), que, a su vez, se basa en nuevos datos "proporcionados por la Agencia del Medicamento Noruega".
Aunque la NIAC precisó que no se han establecido aún "vínculos entre la vacuna contra la covid-19 de AstraZeneca y estos casos", recomendó suspender "temporalmente" su administración como medida de "precaución".
En España, Sanidad insiste en que la vacuna es segura y no se han registrado casos graves en nuestro país tras su inoculación. Pero Castilla y León, Andalucía, Canarias, Cataluña, la Comunidad Valenciana y Asturias han paralizado por el momento su uso mientras se investigan las partidas que han podido provocar efectos secundarios.
Desde la farmacéutica aseguran que tras una revisión exhaustiva no hay evidencias de que su vacuna aumente el riesgo de sufrir trombosis o embolia pulmonar, argumento respaldado por la OMS.
Tedros Adhanom Ghebreyesus, director general, Organización Mundial de la Salud: “La Agencia Europea del Medicamento ha dicho que no hay indicios de un vínculo entre la vacuna y los coágulos de sangre, y que la vacuna puede seguir utilizándose mientras su investigación está en curso”.
Llaman a la calma y mientras la Agencia Europea del Medicamento continúa investigando a fondo el fármaco, defiende que los beneficios son mayores que los riesgos.