Un niño ha muerto y otro ha resultado herido grave después de que su padre supuestamente los apuñalara y los arrojara por la ventana de su apartamento en la ciudad de Hässelby, al oeste de Estocolmo, Suecia. Los hermanos, ambos menores de 10 años, cayeron desde una altura de 15 metros.
El padre de los menores, de unos 40 años, y una mujer que reside en la misma vivienda, han sido detenidos como sospechosos de asesinato. Los hechos ocurrieron ayer domingo, cuando varios vecinos alertaron a las autoridades tras escuchar gritos y golpes. A su llegada, los agentes encontraron a dos niños gravemente heridos frente a un edificio de apartamentos.
Los menores fueron trasladados en helicóptero al hospital, pero no se pudo salvar la vida de uno de ellos. "Sospechamos que han caído desde una gran altura, desde una casa", ha confirmado la portavoz de la policía sueca, Helena Boström Thomas. El padre habría resultado herido durante su detención, según apuntan los medios locales.
Los vecinos de Hässelby, que están consternados por lo sucedido, han querido rendir homenaje al pequeño fallecido y apoyar a su hermano. "Estoy muy afectado, he vivido aquí durante 16 años. Es donde crecieron nuestros hijos. Es algo trágico", ha señalado una mujer al respecto. "A las cinco de la tarde escuchamos al hombre gritar y llorar. Después se movieron los muebles", ha comentado otro vecino. La investigación sigue abierta.