Las altísimas temperaturas que se viven en el oeste de Canadá y las tormentas eléctricas de los últimos días han propiciado, según los meteorólogos, un escenario perfecto para los incendios forestales.
Un total de 710.000 rayos se registraron en la Columbia Británica y en el oeste de Alberta entre las 15:00 horas de la tarde del pasado miércoles y las 6 de la madrugada del jueves. Los bomberos luchaban este viernes contra 136 focos activos de incendio, que según los primeros informes devorarán cerca de 100.000 hectáreas de monte durante el fin de semana.
Los fuegos también han obligado a evacuar 1.300 hogares. Lytton, a unos 260 km al noreste de Vancouver, está amenazado por las llamas, lo que ha causado el desalojo de sus residentes. El alcalde de Lytton, Jan Polderman, ha sido el encargado de dar la orden para los 250 habitantes de la localidad en la que los termómetros alcanzaron el martes los 49,5ºC, la mayor temperatura jamás registrada en Canadá.
Las autoridades canadienses están investigando la muerte de casi 500 personas a causa de la intensa ola de calor que azota el país desde el pasado viernes, con temperaturas que han alcanzado la cifra récord de 49,6ºC y que afectan principalmente a la población de la provincia de Columbia Británica, en el oeste del país.
En Columbia Británica se han registrado al menos 486 muertes súbitas durante los últimos cinco días, unos datos que han hecho saltar las alarmas y que superan con creces la media de fallecimientos diarios ocurridos en años anteriores por las altas temperaturas.
Esto constituye, según el Gobierno, en un aumento del 66 por ciento de los decesos para un periodo de cinco días respecto a 2020, según informaciones de la cadena de televisión Global News.
"Si bien es pronto para decir cuántas de estas muertes están efectivamente relacionadas con el calor, creemos que el aumento significativo se puede atribuir a las condiciones meteorológicas extremas", ha señalado Lisa LaPointe, de la Policía.
La ola de calor ha sido producida por lo que los meteorólogos han descrito como una "cúpula de alta presión" sobre el noroeste, la cual se ha visto agravada por el cambio climático. La ciudad de Vancouver ha registrado así las temperaturas más altas de la historia, con los termómetros marcando más de 46ºC.
El martes fue el tercer día consecutivo que la localidad de Lytton, una de las más golpeadas, batía su récord de temperatura tras alcanzar los 47 grados centígrados. La ciudad se ha convertido en el lugar más caluroso de Canadá durante tres días consecutivos.