Una madre latina denunció que su novio la mantuvo secuestrada durante más de dos meses en su casa en Las Vegas (Nevada), que parecía una "fortaleza", y que no pudo ver a su hijo de 4 años, quien fue encontrado muerto dentro de un congelador, informó el abogado de la víctima a los medios.
Por los hechos está detenido Brandon Toseland, de 35 años, quien enfrenta cargos de homicidio y secuestro.
Dahsia Maldonado y su hijo de 4 años fueron encontrados en la casa el martes pasado, después de que ella lograra enviar una nota de alerta con su hija con la que supuestamente tenía contacto limitado.
La pequeña le pasó varias notas a su maestra de escuela en las que la madre decía que estaba retenida contra su voluntad.
Señalaba que temía por su hijo, el hermano menor de la niña, y que ella no sabía dónde estaba el pequeño, según el Departamento de Policía Metropolitana de Las Vegas.
La policía halló a la mujer en la residencia y detuvo a Toseland, a quien se le negó la libertad bajo fianza en su primera audiencia.
Maldonado detalló a la policía que había sufrido abusos por parte de su novio, con quien vivía desde marzo de 2021, y que no había visto a su hijo, Mason Domínguez, desde el 11 de diciembre pasado.
La mujer aseguró que Toseland le prohibió salir de la casa, como también entrar al garaje, donde la policía encontró el cuerpo del pequeño dentro de un congelador, dijeron las autoridades.
La relación de ambos comenzó en enero del año pasado cuando murió Eli Domínguez, que era el esposo de Maldonado y padre de los dos niños.
El hombre supuestamente era amigo de Domínguez y le brindó respaldo a la mujer, dijo al canal de televisión KTNV Stephen Stubbs, abogado que representa a Maldonado.
Eventualmente la amistad se convirtió en una relación romántica, y ella se mudó con los niños a la casa de Toseland.
Maldonado vio a su hijo Mason por última vez en diciembre cuando el niño se enfermó.
La mujer asegura que Toseland llevó al menor al dormitorio principal, bloqueó la puerta y le prohibió verlo, según las declaraciones dadas al canal.
El abogado dice que la casa era como una "fortaleza". Toseland tenía cerraduras, alarmas en las ventanas, sensores de movimiento y otras protecciones de seguridad para evitar que Maldonado y sus hijos escaparan.