Bella-Rae Birch, una niña de solo 17 meses, murió el 21 de mayo en Inglaterra tras el brutal ataque del perro de su familia, que llevaba solo una semana con ellos. Los médicos trataron de reanimarla pero no pudieron hacer nada por su vida.
Los hechos ocurrieron el lunes 21 de marzo sobre las 15:50 horas en la localidad de St. Helens, en Merseyside (Inglaterra), cuando los vecinos empezaron a escuchar gritos de auxilio. Inmediatamente, algunos se acercaron y vieron cómo el perro, un American Bully, atacaba a la menor, según confirma la BBC.
Cuando lograron liberarla, la asistieron y trataron de reanimarla practicándole la RCP hasta la llegada de la ambulancia, que la trasladó a un hospital cercano, pero los médicos no pudieron hacer nada por salvar su vida.
La Policía investiga lo ocurrido y ya ha sacrificado al animal. Pide que cualquiera que pueda aportar información a la investigación se ponga en contacto con ellos.
Por su parte, la familia, que ha iniciado una página de recaudación de fondos para la pequeña, pide respeto en este momento. "Pediríamos que ahora se nos permita algo de espacio y tiempo para tratar de aceptar la trágica pérdida de nuestra querida Bella-Rae", reza un comunicado.