Con 49 años, Jason Kelk se convirtió en el paciente que más tiempo ha estado ingresado en Reino Unido por coronavirus. Tras 14 meses y medio, el hombre ha fallecido rodeado de sus seres queridos en un centro de Leeds.
Poco después de que los primeros casos de coronavirus llegasen a Europa, el 31 de marzo, Jason Kelk ingresó en el Hospital St James de Leeds por la covid-19. El hombre, un paciente de riesgo al tener asma y diabetes de tipo 2, fue trasladado a la Unidad de Cuidados Intensivos (UCI) solo tres días después de su ingreso.
Allí pasó más de un año. Durante este tiempo, ha estado en una situación crítica en varias ocasiones. Los pulmones y los riñones le dejaron de funcionar y también tuvo complicaciones en el estómago. Le alimentaban vía intravenosa y respiraba gracias al ventilador.
Un año después de ingresar, en marzo de 2021, Kelk presentó una mejoría notable. Pudo estar 15 días respirando por si solo, sin ventilador; y comenzó a comer. Llegaron a pensar que podría continuar el tratamiento en casa, según publicaron en una página creada en 'GoFundMe'. Sin embargo, poco después, en mayo, empeoró y desarrolló dos infecciones virales.
Hace solo tres semanas, Jason Kelk pasó a depender a tiempo completo del ventilador para poder respirar y en ese momento se rindió, según cuenta su mujer, Sue Kelk, a Calendar News en una información publicada por leeds-live.co.uk.
El hombre dijo que ya no "quería vivir" así durante más tiempo y se le retiró todo tipo de tratamiento y asistencia que le mantenía con vida en el hospital. Fue trasladado a un centro para pasar sus últimas horas rodeado de sus seres queridos.
"Creo que esto es lo más valiente que podrías haber hecho en tu vida", expresa su mujer, "decir 'no quiero vivir más así'".