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La patinadora australiana de origen ruso Ekaterina Alexandrovskaya, campeona mundial júnior de pareja en 2017, ha fallecido a los 20 años en Moscú, informaron este sábado las agencias rusas, que señalan que la Policía cree en un posible suicidio.
De acuerdo con la agencia Interfax, el cuerpo de Alexandrovskaya fue hallado sin vida en una calle cerca de su apartamento en el centro de Moscú tras caerse de una ventana.
Las circunstancias de su muerte aún están siendo investigadas, pero fuentes policiales indicaron a Interfax y a la agencia TASS que "la causa preliminar es suicidio".
Alexandrovskaya dejó una nota con la palabra "amor", según fuentes de la investigación citadas por la agencia RIA Nóvosti.
De acuerdo con Interfax, la deportista regresó a Rusia después de sufrir una lesión durante un entrenamiento en Canadá.
Su expareja sobre el hielo, Harley Windsor, escribió hoy en su cuenta de la red social Instagram que se encuentra "desolado" por "la triste y repentina muerte de Katia".
"Todo lo que hemos logrado durante nuestra asociación es algo que jamás olvidaré y siempre guardaré en mi corazón", afirmó.
La pareja se separó a finales de febrero debido a "preocupaciones de salud" , según escribió entonces el patinador en Instragram, en la que deseó a Ekaterina una "pronta recuperación".
La patinadora representó a Rusia hasta 2016, cuando fue invitada a competir bajo la bandera australiana. En 2017 se convirtió en campeona mundial júnior junto a Windsor.
Los dos también ganaron en 2017 el Grand Prix Júnior. En Australia la pareja se alzó además en dos ocasiones con el campeonato: en 2017 y 2019.
También participaron en los Juegos Olímpicos de Invierno de 2018 en PyeongChang, donde acabaron en décimo octavo lugar.
Esta trágica noticia llega solo una semana después de que se conociese la muerte de otra patinadora: Lara van Ruijven, de 27 años. La holandesa, bronce en los Juegos Olímpicos de Invierno de 2018, murió este viernes en un hospital de la localidad francesa de Perpiñán al no superar una enfermedad autoinmune.
Van Ruijen ingresó el pasado 25 de junio en un hospital de Perpiñán, donde se encontraba concentrada junto al resto de la selección holandesa, debido a “serios problemas de salud”, explicó la Federación Holandesa de Patinaje en un comunicado. Cuatro días después tuvo que entrar en una Unidad de Cuidados Intensivos y se le indujo un coma artificial.
El sangrado interno, especialmente en el cerebro, empeoró rápidamente la situación y finalmente la campeona falleció.