Ucrania denuncia violaciones a menores en zonas ocupadas por los rusos y se han convertido ya en un botín de guerra claro. La violación se ha convertido en un arma de guerra en Ucrania. La defensora del pueblo ucraniano denuncia que cerca de 25 niñas y mujeres de entre 14 y 25 años fueron violadas sistemáticamente por soldados rusos en un sótano en Bucha, donde las madres se ofrecían para que sus hijos e hijas no fueran violados sin suerte. Fue el horror y la depravación en una ciudad arrasada, sin ley.
El alcalde de Bucha ha confirmado estos abusos durante el mes que las tuvieron encerradas en un sótano en la localidad, convertida en icono del horror por las imágenes de civiles muertos tras el repliegue ruso.
Tras estas agresiones sexuales - que las autoridades rusas siguen negando-, 9 de ellas están ahora embarazadas. Desde Naciones Unidas se han comprometido a investigar estas denuncias de violación sexual que el propio Zelenski ha expresado esta mañana ante el Parlamento lituano. "Hemos detectado cientos de violaciones de menores, de niñas pequeñas e incluso de un bebé. Da miedo hablar de esto ahora", ha advertido el presidente ucraniano.
El Gobierno estadounidense ha acusado a Rusia de cometer "atrocidades generalizadas". El presidente, Joe Biden habla de genocidio. El secretario de Estado, Antony Blinken, ha recordado el testimonio de estas niñas y mujeres que han sido violadas, así como el ataque a infraestructuras civiles, como un teatro o una estación de tren.
La cadena británica 'BBC' ha recogido varios testimonios de mujeres agredidas sexualmente durante la invasión. Recuerdan cómo "a punta de pistola", irrumpieron en su casa para después violarla. Los maridos que intentan evitar las violaciones son asesinados a sangre fría ante sus esposas. Las líneas de teléfono atención a las víctimas y los canales de Telegram están recibiendo testimonios de mujeres que han sido agredidas sexualmente en la guerra hasta en plena calle.
El presidente de Ucrania ha pedido más recursos para hacer frente a la invasión de Rusia en su país y para poder acabar con el sitio de la ciudad portuaria de Mariúpol, donde advierte que se podrían utilizar armas químicas. El mandatario ha indicado que Rusia prepara "una nueva etapa de terror. Las mujeres y las niñas tildadas de nazis ya son un objetivo.