Luciana Rebello es una joven brasileña de 31 años enferma de cáncer, una enfermedad de la que debe tratarse con quimioterapia, un método que hace que el pelo se caiga en muchos casos.
Para prevenir eso, con mucha entereza y después de llevar ya varios meses con el tratamiento, la joven de Río de Janeiro decidió raparse y organizó toda una ceremonia en torno a su corte de pelo, en el que estaban sus propias hijas, otras familiares y por supuesto, su madre.
El momento más emotivo llegó cuando Volta Redonda coge la máquina de rapar y comienza a cortarle el pelo a su hija. En un momento dado, la señora deja de rapar a su hija y comienza a raparse a sí misma.
Y es que Volta no quería que su hija pasara sola por el trance de estar sin cabello, por lo que decidió acompañarla, algo que hizo llorar de emoción a su hija.
El vídeo en el que se ve ese acto de amor maternal se ha convertido en viral, dando la vuelta al mundo y acumula miles de comentarios de apoyo y reconocimiento para ambas. "Nada como el amor de madre", sentencia Luciana en su Instagram, acompañado por el video que tiene ya miles de reproducciones.
Sin duda, un ejemplo de lo que puede llegar a hacer una madre por su hija para ayudarla a sentirse arropada y que, en este caso sin duda, lo ha conseguido con creces.