En la histórica ciudad brasileña de Petropolis la devastación tras las fuertes lluvias de los últimos días es total. Corrimientos de tierra e inundaciones han dejado un rastro de destrucción y más de 150 muertos confirmados. La búsqueda de supervivientes continúa, con decenas de personas aún desaparecidas.
La Policía Civil difundió una nueva lista con la identificación de parte de los fallecidos, 16 más que en el recuento del viernes. El registro de personas desaparecidas, según la Comisaría de Descubrimiento de Paradero, ha bajado de 191 a 165 en la última actualización, según ha podido saber 'O Globo'.
El Instituto Médico Legal (MIL) ha recibido los cuerpos 89 mujeres y 55 de hombres, a los que hay que sumar 27 son menores de edad, niños y adolescentes.
Se han reforzado las tareas de búsqueda con nuevas dotaciones de bomberos provenientes de otros estados brasileños, que cuentan además con 36 perros rastreadores para encontrar a las víctimas desaparecidas, según ha informado la Agencia Brasil.
Mientras, los residentes tratan de recomponer sus vidas en medio de las ruinas. Muchos de ellos se han quedado sin nada. "No puedo vivir más aquí, es una tragedia tras otra y los que tendrían que preocuparse de la ciudad solo hacen una promesa falsa tras otra", asegura un vecino.
Pese a todo, hay quien trata de volver a la normalidad como el dueño de un puesto de comida callejero. Se espera que el gobierno brasileño lance una ayuda de emergencia de 95 millones de dólares para reconstruir las zonas afectadas, aunque para muchos podría llegar demasiado tarde.
"Es emocionante ver la movilización de los otros estados en el envío de equipos a Río de Janeiro para ayudarnos con las búsquedas en Petrópolis. Muchas gracias a los gobernadores", ha dicho Claudio Castro, gobernador de Río de Janeiro.
Las autoridades ya han catalogado las lluvias como "las peores registradas en un siglo", y se han mostrado preocupadas por la posibilidad de que tengan lugar nuevos deslizamientos de tierra, pues el pronóstico meteorológico predice más lluvias este fin de semana, según ha explicado Agencia Brasil.
Asimismo, existe preocupación por la transmisión de enfermedades, por lo que el Departamento de Salud de Brasil ha recomendado a los ciudadanos que han tenido contacto con el agua de la inundación o que han tenido lesiones a la piel, que estén al tanto de posibles síntomas.