En la Puerta del Sol miles de seguidores arroparon el sábado por la noche a Guaidó, ante los que se arrodilló para rendir homenaje a las víctimas de la situación en Venezuela.
Terminaba así una visita de cinco horas a España en las que ha recibido todos los honores de partidos de la oposición, que critica que no lo haya recibido Pedro Sánchez. "El problema es que debe su puesto en La Moncloa a los amigos del chavismo. Todo el mundo sabe que todos los fundadores de Podemos estaban con el chavismo", asegura la presidenta de la Comunidad de Madrid, Isabel Díaz Ayuso.
Pero Guaidó ha quitado hierro al asunto y ha hablado de gira organizada con poco tiempo y problemas para cuadrar las agendas.
Tampoco ha querido opinar sobre la polémica desatada por el encuentro entre José Luis Ábalos y la vicepresidenta de Maduro. Asunto por el que el PP insiste en la dimisión del número 3 del PSOE, al que acusan de "deslealtad a su país".
Hoy Guaidó viaja ya hacia Canadá, donde el lunes se reúne con más emigrantes venezolanos. Según fuentes de su entorno, sobre la mesa una posible reunión con Donald Trump.