Muere un joven en Buenos Aires víctima del coronavirus tras negarse a vacunar
Tres de los fallecidos por la covid-19 no tenían patologías previas
Solo uno de los fallecidos se había negado a vacuanarse
Los cuatro tenían menos de 35 años
La mortalidad de la pandemia de covid-19 crece sin parar entre la población joven de todo el mundo. La falta de protección y la relajación de las medidas de prevención los convierten en objetivo fácil del virus SARS-CoV-2. Es lo que está pasando últimamente en Buenos Aires, la capital de Argentina en la que cuatro jóvenes han sido víctimas de la enfermedad recientemente.
El último de los fallecidos ha sido Jonatan González, un joven de 30 años y sin problemas previos médicos que lo colocaran en una situación de riesgo. Jonatan se había negado a vacunarse a pesar de trabajar en una clínica privada y ser personal de riesgo.
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Antes que él, otros tres menores de 35 años han muerto víctimas de la pandemia. El pasado 15 de mayo fallecía Sol Casella, de 24 años, periodista y estudiante universitaria. Tras contagiarse el 18 de abril empezó a experimentar complicaciones respiratorias que llevaron a los facultativos a inducirle un coma del que no pudo recuperarse.
Cinco días más tarde era Ailén Actis la que moría como consecuencia de la pandemia. Esta madre de dos hijos de 33 años no presentaba patologías previas pero tuvo que ser ingresada en una clínica privada donde falleció tras 20 días de lucha contra la enfermedad.
Un día antes de la muerte de Jonatan, fallecía un policía de 34 años, Jesús Carballo. El suyo es un caso diferente al resto ya que sí tenía patologías previas que hacían temer por el desenlace como es el caso de una diabetes. Carballo estuvo cuatro semanas ingresado en un centro sanitario antes de morir.
Los responsables de la clínica en la que trabaja Jonatan han querido hacer público su dolor y tristeza por su fallecimiento. En su comunicado aseguran estar sufriendo un estado de "incredulidad, vulnerabilidad e impotencia" por el fatal desenlace.
La directiva recuerda que Jonatan fue el primero en ofrecerse cuando empezaron a fallecer los sanitarios que trabajan en primera línea por eso le recuerdan "¡Dándolo todo! ¡Así viviste!".