Belén Riva Roy, una profesora de yoga, ha denunciado a través de su cuenta de Instagram el acoso que sufrió a plena luz del día por dos hombres mientras meditaba en los Bosques de Palermo, en Argentina. La mujer agradece que un hombre que pasaba con el coche por allí se involucró en ayudarla y relata el momento de miedo que sintió a la vez que pide mayor seguridad en la ciudad para evitar situaciones así.
Con lágrimas en los ojos y angustiada, Belén Riva Roy, recuerda lo que sucedió el jueves cuando fue a meditar en un vídeo de más de cinco minutos en su cuenta de Instagram que ha acompañado de un mensaje.
"Hola, bueno, quiero contar algo que me acaba de pasar en los Bosques de Palermo. Fue con suerte, pero esta vez me pasó a mí. Voy a intentar resumirlo", comienza diciendo la joven en el vídeo que fue "a meditar a los bosques, fui a una zona, al lado de la avenida, una zona transitada, había dos parejitas cerca".
Allí, relata, "me pongo los auriculares, empiezo a trabajar en un proyecto mío, empiezo a escribir y en ese momento no me doy cuenta que la pareja de al lado se había ido. Miro para el costado, para el lado derecho y veo que empiezan a caminar hacia mí dos hombres, uno sin remera. Entonces, intento pensar positivo, como siempre, y vuelvo a lo mío. Cuando vuelvo a lo mío, vuelvo a girar la mirada hacia ese lado y ya los tengo muy cerca".
"Intento respirar y ya pienso, mi mente ya piensa, en darles todo con tranquilidad. Pienso en darles mi celular y en darles la bicicleta. Cuando se acercan, cuando se acercan más, expresan que tenían ganas de hacerme lo mismo que le hace un actor a una actriz en una película mundialmente conocida sobre sexualidad y sadomasoquismo", prosigue entre lágrimas, expresando que "quizás pueda parecer poco, pero cuando te lo dicen es un montón porque una nunca sabe si lo van a cumplir o no".
En ese momento, dice, "yo me quedé dura, cierro los ojos y siento que en ese momento se me para el mundo. Realmente, sentí miedo por primera vez en mi vida. Me pasa el hombre por atrás y siento su miembro pasándome por detrás en la cabeza".
Pero, tras esa situación, cuenta la profesora "empiezo a escuchar ‘¿estás bien? ¿estás bien?’". "Un hombre que pasaba en un auto y vio la situación, se involucró. Entonces, agradezco de corazón a ese hombre porque estoy segura, pero segura, que no me hicieron nada porque ese hombre se involucró en ayudarme", recalca.
"Cuando los hombres se van, yo quedo totalmente asustada, totalmente perpleja. En ese momento se me paró el mundo y viene otro hombre y me dice ‘no no le hicieron nada’. Volvemos a lo mismo ¿Qué es no hacer nada? A mí sí me hicieron todo. Hoy la verdad, estoy bien. Tuve suerte, no me tocaron, no me penetraron pero sí me cagaron el día, sí me dejaron con miedo. Y eso es algo no debería suceder. Las mujeres deberíamos poder estar en una plaza sin que nos sucedan estas cosas, deberíamos poder caminar sin que nos sucedan esas cosas", subraya, expresando que "siento que nunca tuve el miedo que tuve hoy. No me pasó nada y agradezco a la vida que no me haya pasado nada, pero fue una situación de mierda porque cuando un hombre te dice que te va a hacer algo sexual no sabés si es capaz de hacerlo o no. Gracias a Dios no fueron capaces de hacerlo, pero esto no debería pasar, no debería pasar más".
A continuación, la mujer denuncia la falta de seguridad en la ciudad y reclama que los agentes actúen porque las mujeres no pueden hacer cosas "como sentarnos en una plaza, sentarnos en los bosques… No podemos porque nos pasa esto. Viene una bestia y nos arruina el día".
Por todo ello, vuelve a recalcar que en ese momento hubiese un hombre que se involucrase ya que "me sentí protegida, así que le agradezco muchísimo a esa persona", dice antes de finalizar indicando que "no deberían existir estas cosas, estas cosas ya no deberían de existir".
Además, en el mensaje que ha acompañado el vídeo, la joven deja constancia de que "para algunos no será nada. Para las mujeres sí lo es. Un minuto que dura horas en el cual pensás si se atraverán a hacerte lo que te están diciendo. Porque no es descabellado pensar que lo harán, con todo lo que vemos que sucede minuto tras minuto en nuestro país. Agradecida por estar bien. Tuve la suerte que otras mujeres no tuvieron. No sucedió más que esto que cuento. Pero para mí, fue enorme. Y el miedo invadió todo mi ser", recalcando, una vez más que "esto no debería existir más. Deberíamos poder caminar y vivir tranquilas. No existe zona insegura, no existe como estaba vestida. Nos sucede en cualquier esquina, momento y lugar del día"