Lindsey, una joven estadounidense de 21 años murió el pasado miércoles en Bahamas a consecuencia del ataque de varios tiburones blancos mientras buceaba. Los padres de Lindsey, que se encontraban con ella en el momento de la tragedia, según informa el Daily Mail, dijeron que vieron a los tiburones acercarse y le advirtieron, pero su hija no los escuchó a tiempo.
“Ella era tan cariñosa. Amaba a todos los animales. Es irónico que un tiburón la atacara", dijo el padre de Lindsey , Michael, en un comunicado a la cadena NBC. La tragedia pudo ser aún peor porque minutos antes había acabado un curso de buceo en la misma zona.
Lo último que hizo en su vida, sin adivinar su trágico destino, fue tomar fotos de la bellísima zona en la que veraneaba: la isla Rose en Las Bahamas. La joven fue atacada en brazos, piernas y glúteos y resultó imposible salvar su vida. Es el primer ataque mortal de tiburones en Las Bahamas en una década.
Lindsey estudiaba Comunicaciones Ambientales en la Universidad Loyola Marymount. Debido al suceso el Ministerio de Agricultura y Recursos Marinos de Bahamas ha pedido a los bañistas precaución a la hora de adentrarse en el mar.
El pasado dos de junio una joven de 17 años fue atacada por un tiburón en Carolina del Norte a consecuencia del cual fue herida en ambas piernas, la pelvis y sus manos, informaron entonces las autoridades locales. Cinco personas murieron por ataques de tiburones en todo el mundo en 2018, un año en el que los incidentes no provocados fueron inferiores al promedio y en los que más de la mitad de las víctimas fueron surfistas o practicantes de otros deportes con tabla, según un informe científico publicado en enero de 2019.
El Archivo Internacional de Ataques de Tiburones (ISAF), una entidad de la Universidad de Florida con sede en Gainesville, investigó 130 incidentes entre incidentes en 2018, de los cuales catalogó 66 como no provocados, una cifra inferior a los 84 registrados en promedio anualmente en el periodo 2013-2017.
Cinco personas murieron el año pasado a causa de ataques de tiburones y en cuatro de estos casos, ocurridos en Estados Unidos, Australia, Brasil y Egipto, no hubo provocación reveló el estudio.
Australia, con 20 casos, y Brasil y Egipto, con tres cada uno, siguen en la lista de 2018, que también incluye a Sudáfrica con dos casos, y Bahamas, Costa Rica, islas Galápagos (Ecuador), Tailandia, Nueva Caledonia y Nueva Zelanda, con uno ataque cada uno.