El Alto Representante de la Unión Europea para Política Exterior, Josep Borrell, ha asegurado este sábado que una zona de exclusión aérea sobre Ucrania apoyada por la UE supondría "extender el conflicto a una tercera guerra mundial".
"Cuando alguien pide una zona de exclusión aérea eso implica tener la capacidad y voluntad de derribar los aviones rusos que la violen. Sería extender el conflicto a una Tercera Guerra Mundial y es evidente que no queremos hacerlo", ha explicado Borrell en una entrevista a El Periódico de Cataluña. El jefe de la diplomacia europea ha explicado que la Unión se mueve "en el límite" de sus capacidades para ayudar, sin entrar, eso sí, en "una situación de beligerancia" que haga a Bruselas formar parte del conflicto.
Borrell ha subrayado el papel de las sanciones económicas que, a pesar de no tener la capacidad de parar la guerra "de la noche a la mañana", ofrecen la posibilidad de "debilitar a la economía rusa". Estas sanciones, según ha detallado el Alto Representante de la UE, "van a costar muy caro a Rusia". Por otra parte, Borrell no ve motivos para que Ucrania renuncie a su posible adhesión a la Unión Europea, a pesar de las reticencias de varios miembros de la UE para lanzar un procedimiento 'exprés'.
"Nadie puede impedir que Ucrania forme parte de la familia europea porque es parte de la familia europea. Nadie tiene que dar permiso. Quiere vivir en un sistema de libertades públicas donde la gente elige sus gobiernos y una economía de mercado. Es lo que no le gusta a Putin porque es tener a parte de la población eslava viviendo bajo un sistema político que ofrece más libertad, derechos y prosperidad", ha asegurado el jefe de la diplomacia europea.