El alto representante de la UE para asuntos exteriores, Josep Borrell, cree que Rusia intentó "una guerra relámpago", pero está haciendo "una carnicería de civiles en Ucrania. A su juicio, los ucranianos han inventado una tercera manera de afrontar la guerra, que consiste en detener con misiles antiaéreos las columnas blindadas el ejército ruso, "que como no sabe avanzar, lo que hace es destruir".
Para Borrell, lo urgente es aportar material militar a Ucrania para que siga resistiendo. No es cuestión la guerra de 48 horas, sino que según el alto representantes "todo se va a decidir en los próximos 15 días". Borrell se ha congratulado de que los ucranianos haya conseguido romper el cerco de Kiev que los rusos no puedan tomar la capital. Pero ha asegurado que el Ejército ucraniano necesita armamento, y la OTAN debe dárselo. Ha calculado en unos 40.000 los soldados rusos muertos o capturados, lo que está haciendo sufrir a Rusia.
El alto representante de la UE ha asegurado en RTVE que Rusia no quiere sentarse a negociar todavía un alto el fuego. "Quiere ocupar terreno y rodear la costa y aislar a Ucrania e ir a negociar en serio cuando haya conquistado una posición que le permita obtener fuerza", ha asegurado. Mientras que Ucrania "está dispuesta a negociar pero no encuentra un interlocutor. No es fácil negociar un alto el fuego así. A ver si patina tanto que no pueda hacer lo que busca. Para eso es necesario ayudar militarmente a Ucrania.