Italia estrena el veto europeo a la exportación de vacunas contra el coronavirus Ha paralizado 250.000 dosis de Astrazeneca fabricadas en el país que la farmacéutica quería enviar a Australia. Se activa así el mecanismo de control que la Unión Europea puso en marcha en enero. Además, la Unión estudia la aprobación de la vacuna rusa y abre la puerta a que cada país negocie su compra.
Europa ha puesto el acelerador en la campaña de vacunación. Al estudio de las vacunas de Curevac y la posible aprobación el 11 de marzo de la de Johnson and Johnson, la Agencia Europea del Medicamento ha iniciado el proceso para autorizar la Sputnik V.
Esta vez con una diferencia, Bruselas dejará que cada estado miembro decida o no adquirirla. España es uno de los que estaría interesado.
Mientras Alemania se suma a otros países de la Unión que va a empezar a administrar la de AstraZeneca a mayores de 65 años.
Esta farmacéutica está de nuevo en el punto de mira. Con el respaldo de la Comisión Europea, Italia ha bloqueado un cargamento con 250.000 dosis producidas en la planta que la empresa tiene en el país y que iban a ser enviadas a Australia.
Esta venta ponía en peligro el suministro europeo y ya hay un acuerdo por el que Europa podía controlar sus exportaciones.
Quién si cumple lo acordado, es la administración del nuevo presidente norteamericano, Joe Biden. Cada día dos millones de personas se están vacunando en Estados Unidos.