La organización Human Rights Watch (HRW) ha instado este sábado al Gobierno de Irán a liberar a las mujeres detenidas por vestirse de hombre para poder asistir a un partido de fútbol.
Entre las mujeres detenidas el pasado 13 de agosto se encuentran la activista Zahra Khoshnavaz, que lucha por poner fin a la prohibición que impide a las mujeres y las niñas de este país asistir a eventos deportivos públicos, y Forough Alaei, una destacada fotoperiodista.
HRW ha denunciado que esta exclusión es una clara violación de las normas de los estatutos y de la política de Derechos Humanos de la Federación Internacional de Fútbol (FIFA). El artículo cuatro de estos estatutos precisa que la discriminación contra la mujer "está estrictamente prohibida y se castiga con la suspensión o la expulsión".
El pasado mes de junio, el presidente de la FIFA, Gianni Infantino, advirtió a la Federación iraní de que tenía que adoptar medidas concretas para que las mujeres pudiesen entrar en los estadios o, de lo contrario, serían sancionados.
"Las mujeres iraníes no deberían pasar ni un segundo en prisión porque las autoridades las acusan de desafiar pacíficamente una prohibición ridícula que niega a las mujeres y las niñas la igualdad de derechos para asistir a un partido de fútbol", ha lamentado Minky Worden, directora de Iniciativas Globales de Human Rights Watch.
"Irán debería liberar inmediatamente a estas mujeres y levantar la prohibición discriminatoria de que las mujeres asistan a los eventos deportivos", ha añadido. Las mujeres y niñas que quieren asistir a los principales partidos de fútbol en Irán han tenido que disfrazarse durante mucho tiempo de hombres para ejercer pacíficamente esa derecho. Muchas de ellas han publicado vídeos en las redes sociales para mostrar el desafío que supone acudir a alguno de estos eventos deportivos.
La agencia de noticias Iran Wire informó el pasado 16 de agosto de que las autoridades de Irán habían arrestado a seis mujeres y las habían trasladado a la prisión de Qarchak, cerca de Teherán.
Human Rights Watch ha señalado que el 13 de agosto, las activistas fueron llamadas para ser interrogadas en Teherán. Un día después, las autoridades llevaron a las activistas a la Fiscalía de Vozara, donde un juez les impuso una fianza. Sin embargo, no fueron liberadas por lo que, más tarde, ese mismo día fueron trasladadas a la prisión de Qarchak. Previamente, estas mujeres habían criticado las malas condiciones de higiene y seguridad de esta prisión.
"Ignorar los deseos de una gran parte de la sociedad sólo porque podría provocar problemas en el futuro y decir que la infraestructura no está lista es muy cruel y es una injusticia", afirmó la activista Zahra Khoshnavaz.
La fotoperiodista Forough Alaei ganó el primer premio del World Press Photo 2019 por su trabajo en la documentación de la cruel exclusión de las mujeres de los estadios de Irán. Durante décadas, las mujeres iraníes se han puesto en peligro para documentar su exclusión de los estadios, lo que supone una negación de los derechos de las mujeres a formar parte de los espacios públicos y de la vida del país. La premiada película Offside 2006 de Jafar Panahi muestra a mujeres y adolescentes arrestadas por tratar de animar a sus equipos.
El presidente de la FIFA visitó un partido en el estadio Azadi en marzo de 2018, durante el cual al menos 35 mujeres fueron arrestadas por intentar asistir. Mientras asistía a un partido en noviembre del mismo año elogió al Gobierno iraní por la presencia de mujeres como "un verdadero avance", aunque sólo se había permitido la asistencia de un grupo selecto de ellas.
Tras los últimos acontecimientos, Infantino ha escrito una carta al director de la Federación de Fútbol de la República Islámica de Irán, Mehdi Taj. En este documento la FIFA establecía el 15 de julo como fecha límite para que Taj informase de los "pasos concretos" que el gobierno iraní tenía previsto dar para levantar la prohibición.
Según la FIFA, el pasado mes de julio el Consejo Ejecutivo de la Federación de Irán decidió permitir la entrada de mujeres a los estadios para los partidos de clasificación para la Copa Mundial.
"La FIFA tiene reglas claras que obligan a sus miembros a permitir que las mujeres asistan a los partidos. Sin embargo, no ha tomado medidas significativas para hacer cumplir sus propias normas", ha aseverado Worden.
"Las últimas detenciones demuestran que se necesita una acción mucho más enérgica que una advertencia verbal de la FIFA y que ésta debe imponer sanciones por una discriminación de género tan flagrante y prolongada", ha concluido.
Aunque las mujeres extranjeras han podido acceder de forma limitada a los partidos, a las iraníes se les ha prohibido entrar en los estadios cuando los equipos masculinos juegan desde la Revolución Islámica en 1979.