La Fiscalía de Ucrania ha anunciado la apertura de una investigación por el "secuestro" de dos voluntarios de Reino Unido por parte de las tropas rusas en Zaporiyia y de los que se desconoce su paradero actual.
El organismo ha emitido un comunicado en sus redes sociales en el que detalla que, de acuerdo con los primeros informes, se estima que la aprehensión de los ciudadanos británicos se produjo a comienzos de semana cuando estos desempeñaban labores humanitarias.
"Según la investigación, el 25 de abril de 2022, militares de las Fuerzas Armadas rusas secuestraron a dos voluntarios de Reino Unido, que estaban involucrados en la organización y provisión de corredores de evacuación en la región de Zaporiyia", ha explicado la Fiscalía.
Así, el organismo ha detallado que la investigación la llevan a cabo empleados del Servicio de Seguridad de Ucrania y ha hecho un llamamiento a la colaboración ciudadana para que, si hay testigos, aporten su testimonio.
El Instituto de Comunicación de Masas de Ucrania (IMI, por sus siglas en inglés) ha constatado que 21 periodistas han muerto, nueve han resultado heridos y 15 se encuentran desaparecidos desde el comienzo de la invasión rusa del país, tiempo durante el cual Rusia ha cometido, según la organización, 243 ataques contra profesionales e instalaciones de medios de comunicación en el país.
El IMI acusa a Rusia de bombardear al menos once torres de comunicación, intimidar a periodistas y bloquear el acceso a medios de información ucranianos en Rusia. Estas acciones, denuncia, han obligado al cierre de 106 medios de comunicación regionales por "las amenazas de los ocupantes rusos o las tomas por la fuerza de salas de redacción" que han provocado la "imposibilidad de trabajar bajo ocupación temporal e imprimir periódicos".
El IMI distingue que siete de los 21 periodistas fallecidos murieron directamente durante la cobertura de la invasión rusa mientras que otros 14 fallecieron en ataques ocurridos cuando no estaban desempeñando su labor. El organismo ucraniano ha constatado también "ocho casos de secuestro de periodistas por parte de los ocupantes rusos" en las regiones de Zaporiyia y Jersón.