El Gobierno del estado indio de Delhi, donde se encuentra la capital del país, ha decidido ampliar el confinamiento local una semana más, hasta el próximo 31 de mayo, y ha avisado de una lenta reapertura dada la situación de contagios actual en todo el país, escenario de una explosión nacional de casos sin precedentes.
"Ahora mismo nuestra prioridad es la de vacunar a cuanta más gente mejor, en el plazo de tiempo más corto posible", ha explicado el ministro jefe del estado, Arvind Kejriwal, antes de anunciar la extensión, que se prolongará hasta las 05.00 del 31 de mayo.
"Hemos hecho todos los preparativos posibles para que la gente esté vacunada en un plazo de tres meses. El problema es que no hay vacunas", ha lamentado Kejriwal.
India ha registrado en las últimas 24 horas unos 241.000 contagios de coronavirus y más de 3.700 muertes asociadas, según los datos del Ministerio de Salud. El país acumula 26,5 millones de casos confirmados, de ellos, 2,8 millones activos, y un total de 299.266 decesos.
Además, el Gobierno indio ha remitido una comunicación a todas las plataformas de redes sociales para pedir que se deje de utilizar la expresión "variante india" del coronavirus.
"Es completamente falso. No existe una variante india citada como tal por la Organización Mundial de la Salud", ha subrayado el Ministerio Electrónica y Tecnología de la Información en su misiva, recogida por el periódico 'The Hindustan Times'. "La OMS no ha asociado el término 'variante india' con la variante B.1.617 del coronavirus en ninguno de sus informes", ha explicado.
Esta variante es la cuarta detectada por la OMS después de la detectada en Reino Unido, la detectada en Brasil y la detectada en Sudáfrica.