El fuego calcina bosques, casas y negocios en Grecia, y suman ya 12 días sin tregua. Mientras los bomberos han conseguido controlar los focos de la capital ateniense, ahora preocupa a las autoridades la virulencia que las llamas han alcanzado en las islas del Este, como Evia donde la población está siendo evacuada por mar y la superficie carbonizada supera las 37 000 hectáreas.
Cientos de personas han reanudado la evacuación de la isla griega de Eubea (o Evia), la segunda más grande del país, ante el enorme incendio que lleva días arrasando la zona, particularmente en el norte, donde los bomberos intentan evitar por todos los medios que el foco se acerque al centro de la isla en lo que supondría una auténtica "catástrofe", según el gobernador de la región de Grecia Central, Fanis Spanos.
El frente norte de las llamas ha rodeado las poblaciones de Galatsona, Ellinika y Agriovotano, entre nuevas órdenes de evacuación para las localidades de Gouves, Artemisio, Kastri, Vouliki y Pefki, cuyos ciudadanos han recibido orden de dirigirse inmediatamente al puerto de Istiaia para ser trasladados al continente.
Al caer la noche, el calor sofocante de las llamas es tan insoportasble como las rachas de viento tórrido que las alimentan y las llevan hacia las viviendas. Amelia, una anciana, busca ayuda desesperada entre los vecinos que escapan con lo puesto y explica a los bomberos entre lágrimas, que ha cerrado todqas las ventanas de su casa y ha rodeado la vivienda de agua. Estos le indican que debe salir cuanto antes, el incendio está descontrolado y lo prioritario es salvar las vidas.
En la huida el escenario es demoledor, se cortan las carreteras y sólo se puede escapar por mar. La desolación marca los rostros de los que lo han perdido todo. Y no se puede contener la indignación entre los aldeanos que se niegan a dejar sus viviendas y negocios. Luchan contra la córera de fuego con mangueras y ramas, cargados de impotencia y frustración.
Las operaciones de los bomberos han tenido pocos resultados en las últimas horas. "Los frentes no terminan. Todos los pueblos son un frente. El fuego se está extendiendo a otros lugares, tenemos resurgimientos en otros lugares. El fuego no se combate con excavadoras", ha declarado Angelos Misirlis, teniente de alcalde encargado de protección civil en el municipio de Istiaia en comentarios recogidos por la edición digital del diario 'Kathimerini'.
También en las últimas horas se ha dado a conocer la muerte de un bombero voluntario, aplastado por la caída de un poste eléctrico, y otros veinte ingresados mientras sus compañeros lidian con al menos cuatro grandes focos repartidos en el país, en medio de una ola de calor histórica, y durante lo que el primer ministro, Kyriakos Mitsotakis, ha descrito como un "verano de pesadilla".
Las llamas han arrasado más de 56 000 hectáreas de terreno, según el Sistema de Información Europeo de Incendios Forestales, en particular en los grandes incendios declarados en Eubea, la segunda isla más grande del país, y otros tres en la región meridional del Peloponeso.
Eubea está ahora mismo partida en dos por las llamas. Los habitantes llevan días realizando evacuaciones masivas por barco a la parte continental de Grecia. "Estamos solos. Nuestro fin está cerca", proclamó el alcalde de la ciudad de Istiaia, Giannis Kotzias, a la cadena estatal griega Skai. Este domingo, y por vez primera desde la declaración de los incendios, ha aparecido apoyo aéreo para auxiliar a los bomberos. "No podemos estar en todas partes", ha lamentado uno de los efectivos a la misma cadena.
El departamento de Bomberos ha indicado 575 bomberos con 35 equipos de tierra y 89 vehículos estaban luchando contra el incendio, incluidos 112 bomberos rumanos y 100 ucranianos enviados a Grecia como refuerzos. Cuatro helicópteros y tres aviones, incluido un enorme avión Beriev-200 arrendado a Rusia, proporcionaron apoyo aéreo.
Prácticamente, toda Europa se ha volcado con el llamamiento de ayuda emitido por el primer ministro griego y son casi un millar de efectivos terrestres y aéreos los que luchan contra los 700 incendios activos a esta hora. Diez países ya han enviado personal y equipos de bomberos, como aviones mientras que otros ocho están enviando más refuerzos. Los daños traducidos en cifras se conoceran el lunes con el primer balance oficial.