Las fuerzas de seguridad británicas han localizado 39 cadáveres en el interior de un camión en una zona empresarial de Essex, Inglaterra, y han detenido al conductor del vehículo, un norirlandés de 25 años, por su supuesta responsabilidad en las muertes. Los servicios de emergencia respondieron a un aviso de madrugada y, al abrir el camión, localizaron los cuerpos.
Las 39 víctimas, 38 adultos y un adolescente, fueron encontrados muertos en el interior del camión, todavía se desconoce su nacionalidad. "Una noticia tan trágica", ha confesado Brandon Lewis, del equipo del primer ministro ha señalado que "los pensamientos están con las víctimas, sus familiares y amigos. La policía está trabajando para garantizar que los responsables comparezcan ante la justicia".
Los investigadores sospechan que el vehículo procedía de Bulgaria y entró en Reino Unido el sábado pasado por el puerto galés de Holyhead. "Estamos en proceso de identificar a las víctimas, pero creemos que será un proceso largo", ha explicado el jefe de la Policía de Essex, Andrew Mariner, al informar de este "trágico incidente", según la cadena Sky News. El conductor "permanece bajo custodia policial mientras continúan las investigaciones".
El equipo forense trata ahora de identificar a los fallecidos y determinar su procedencia, una labor que se supone se prolongará en el tiempo. En junio de 2000, los cuerpos de 58 inmigrantes chinos fueron encontrados en la parte trasera de un camión en Dover. Un conductor de camión holandés fue encarcelado al año siguiente por homicidio involuntario.
El polígono industrial está al lado del Dartford Crossing y se utiliza como punto de parada para los camiones que viajan al sur hacia el Puerto de Dover y el Túnel del Canal, aunque se desconoce la ruta planificada del camión involucrado.
El año pasado se reveló que los traficantes de personas veían la frontera irlandesa como un punto débil para atraer gente a Gran Bretaña. Usan determinadas zonas, una de ellas esta, porque hay menos controles. La ruta pasa por esta zona hasta llegar a Irlanda y de ahí pasan a Belfast por un ferry hasta Glasgow. El verano pasado, a los migrantes se les cobraba 10.000 libras cada uno para hacer todo el viaje, según desvela el Daily Mail.
En 2014, un migrante murió y decenas de otros fueron trasladados al hospital con deshidratación e hipotermia después de que se descubriera a 35 personas en un camión en el cercano muelle de Tilbury, Essex.
Richard Burnett, director ejecutivo de la Road Haulage Society, ha señalado que la tragedia "resalta el peligro de las pandillas que trafican personas en camiones", según The Sun.
El primer ministro Boris Johnson se ha declarado "horrorizado" por el trágico incidente. "Recibo actualizaciones periódicas del Ministerio del Interior y trabajaré en estrecha colaboración con la policía de Essex a medida que establezcamos exactamente lo que sucedió. Mi pensamiento es con todos aquellos que perdieron la vida y sus seres queridos".