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Un gallo que estaba siendo utilizado en una pelea ilegal de estos animales acabó matando a su dueño con un cuchillo en el sur de India, una práctica que continúa en algunos estados del país a pesar de llevar décadas prohibida.
El pasado 23 de febrero se celebraba una pelea de gallos ilegal en las instalaciones del templo de Yellamma. Thanugula Satish un hombre de 45 años de la aldea de Kondapur había traído a su mejor gallo para conseguir el triunfo.
El animal le había proporcionado grandes victorias, pero esta vez será el causante de su muerte. Según la costumbre Satish le ataba un cuchillo a la pata de su gallo. Lo que nadie podría haberse imaginado es que con este elemento acabaría matando a su dueño.
En medio de la pelea el gallo propiedad de Satish intento huir con el cuchillo atado a su pata. Satish corrió en busca del animal para poder atraparlo, sin pensar en el cuchillo que tenía. El final de esta historia acabó con Satish desangrándose.
El propietario del gallo se hizo con él, con tan mala suerte que se clavó el cuchillo en la ingle. La sangre empezó a brotar y aunque los otros asistentes intentaron detener la hemorragia, no fue posible, según Independent.
La policía de Gollapalli explicó que se ha iniciado un procedimiento penal contra los 15 asistentes a la pelea ilegal. Quienes la organizaron y participaron serían responsables de la muerte de Satish, ya que hubo negligencia al no disponer de las medidas de seguridad necesarias para evitar el fatal suceso.
El gallo fue retenido brevemente en la estación de policía local antes de ser enviado a una granja avícola. Varias asociaciones animalistas ya han denunciado los hechos a la espera de que puedan acabar para siempre con este tipo de acciones.
A pesar de que en 1960 se prohibieron a nivel nacional, las peleas de gallos son comunes en Telangana, Andhra Pradesh, Tamil Nadu y Karnataka, estados en el sur de India, particularmente alrededor del festival hindú de Sankranti.
Los gallos suelen llevar cuchillos o hojas de 7,5 cm atados a sus patas. Las espantosas peleas suelen llevarse a cabo bajo la observación de poderosos políticos locales e involucran mucho dinero de apuestas. Miles de gallos mueren cada año en las batallas que, a pesar de los esfuerzos de los grupos de defensa de los animales, atraen a cientos o incluso miles de personas.