La sociedad inglesa aún sigue impactada del asesinato de Sarah Everard de 33 años a manos de un policía, pero no existe consuelo para su familia que aún está asimilando lo ocurrido.
Tras abrirse la investigación del homicidio de la joven, la familia ha podido conocer los últimos movimientos de Sarah momentos antes de desaparecer cuando iba de camino hacia su casa.
Según la investigación, la víctima cenó en casa de una amiga en la universidad de Clapham, al suroeste de Londres, pocas horas antes de su desaparición, según afirma The Sun.
Fue el novio de Sarah, Kent, quien denunció la desaparición al día siguiente después de que la joven no acudiese a una reunión de trabajo.
Por el momento no se conoce la causa médica de la muerte y las investigaciones continúan hasta que se esclarezcan los motivos.
Después de confirmarse que acudió a la cena con su amiga en la universidad, sobre las “21:00 horas hizo una llamada telefónica que duró 15 minutos y finalizó a las 21:27”, aseguró el encargado de la investigación Lee Tullott. Después de eso no se tuvieron más movimientos con su teléfono.
Fue al día siguiente y tras no acudir a una reunión de trabajo que se alertó a la policía, Sarah desapareció el 3 de marzo mientras caminaba hacia su casa después de visitar a una amiga en el sur de Londres.
Su cuerpo fue localizado una semana después en una zona arbolada del condado de Kent, en el suroeste del país, y donde fue detenido como sospechoso el agente de Scotland Yard Wayne Couzens. Los restos mortales fueron identificados el viernes.
Couzens, acusado de la desaparición y la muerte de Everard, ha comparecido este martes en una audiencia ante el Tribunal de Old Bailey, que ha fijado la fecha de su juicio para el próximo 25 de octubre. El acusado, que ha asistido a la audiencia de manera remota a través de la cárcel de Belmarsh, únicamente ha hecho uso de la palabra para confirmar su nombre y su fecha de nacimiento.