Son ya 17 los fallecidos por el virus chino, que se transmite entre humanos, y que es capaz de provocar una neumonía severa.
Hasta ahora más de 400 personas han sido contagiadas y las autoridades chinas advierten de que el nuevo virus podría mutar y extenderse aún más.
En las últimas horas, se ha revelado que el misterioso virus ha cruzado fronteras y ha llegado a Estados Unidos. Allí se ha confirmado el primer caso en un hombre que acababa de regresar de China.
Por su parte, Corea del Norte ha prohibido temporalmente la entrada a los escasos turistas extranjeros que viajan allí por temor a que el coronavirus llegue a su territorio.
Los síntomas del coronavirus son fiebre, fatiga, tos seca y dificultad para respirar.
La Organización Mundial de la Salud reunirá hoy a un grupo de expertos para determinar si el actual brote por coronavirus en China constituye una emergencia internacional.
La propagación del coronavirus coincide, además, con la llegada del Año Nuevo chino, que tendrá lugar el próximo 25 de enero. La fiesta más importante y esperada en China suele traer consigo desplazamientos masivos, y es en ese contexto en el que crece la preocupación y se activan todas las alarmas. Ante la posibilidad de que las celebraciones desaten todavía más el impacto del virus, Pekín ya ha recomendado que no se viaje a la ciudad.