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Tadeo tenía solo tres meses cuando murió por problemas intestinales. Sus padres enterraron su cuerpo, pero días después comprobaron que este había sido sustraído. Finalmente, hallaron el cadáver en el contenedor de basura de una cárcel de Puebla, en México. El caso ha conmocionado al país y desde la organización Reinserta piden que el acto no quede impune.
El 4 de octubre de 2021 nació Tadeo y tres meses después murió por problemas intestinales. Le enterraron el 6 de enero en el cementerio de San Nicolás Tolentino, en Iztapalapa, en México; pero días después sus padres comprobaron que habían sustraído el cuerpo del menor, según publica Infobae.
El 10 de enero, un hombre que cumple condena en el Centro de Reinserción Social de San Miguel (Cereso), en Puebla, halló el cadáver de un bebé en el depósito de basura. El pequeño, según el mismo medio, portaba un brazalete de un hospital en el que se indicaba su fecha de defunción y tenía una incisión en el abdomen.
Sus padres confirmaron la identidad del niño y la Fiscalía ya les ha entregado el cuerpo del bebé, según ha confirmado en su cuenta de Twitter la presidenta de la asociación Reinserta, Saskia Niño de Rivera.
El mismo medio desliza la posibilidad de que el bebé ingresase en la prisión muerto en los brazos de algún adulto y le utilizasen como mula para introducir droga. Por su parte, la Fiscalía de Puebla ya ha localizado a los responsables de introducir al niño en la cárcel y de deshacerse del cuerpo, según publica el medio mexicano El Universal.
Desde la asociación Reinserta han denunciado lo ocurrido y piden que se investigue lo ocurrido y no quede impune. Para ello han iniciado una petición en la web change.org en la que se preguntan, entre otras cosas: "¿Cómo pudo haber ingresado un bebé sin los registros correspondientes? ¿Con qué tipo de autoridades contamos para que exista una ausencia de protocolos y un menor de edad pueda ingresar al Centro y no salir y que éstas no se den cuenta?".
"Con tu firma exigiremos justicia para este bebe y para que las autoridades de Puebla y de las demás entidades implementen los protocolos necesarios a efecto de proteger la vida, el bienestar y la integridad de miles de niñas y niños que viven o visitan los reclusorios", añaden en la petición.