España continúa con su campaña de vacunación contra la covid, administrando especialmente las dosis de Pfizer. Son los primeros pasos, sin embargo, en otros países el proceso está mucho más avanzado: Joy Henningsen, una radióloga de Alabama, EEUU, ha relatado cuáles son los efectos secundarios de la segunda dosis de la vacuna de Pfizer.
"Mi hospital recibió las dosis en el primer envío nacional y todos los trabajadores sanitarios de mi hospital que mostraron interés a través de una encuesta recibieron la vacuna, entre las que fui incluida", señala la radióloga en una entrevista con Business Insider.
Henningsen asegura que tras la primera dosis "no tuvo síntomas" que tuvieran impacto sobre su vida o sus actividades. No obstante, tras recibir el aviso de los efectos secundarios que manifestaron otras personas en la segunda dosis, la doctora se preparó para la posibilidad de sentirse mal uno o dos días después de la inyección.
"Llené la nevera de comida antes de recibir la inyección y compré los mismos artículos que si tuviese un resfriado o gripe (agua, sopa, galletas saladas...). También me aseguré de que mis mascotas tuvieran suficiente comida y agua", explica.
La sanitaria, además, preparó una pequeña bolsa. "Incluía un termómetro para controlar mi temperatura y algunos remedios para calmar la fiebre. Para combatir el contraste entre la fiebre y los escalofríos que algunas personas habían reconocido sufrir, metí unos paños para usar como compresas frías. También metí una manta con peso y un edredón de plumas cerca de mi cama", detalla.
La doctora recibió la vacuna el 7 de enero. "Me sentí bien hasta seis horas después, cuando comencé a sentir una sensación de malestar. Pronto siguieron dolores musculares leves, así como dolor en el lugar de la inyección similar a la vacuna contra el tétanos, es decir, un poco peor que una contra la gripe", destaca. Los síntomas ya eran patentes 12 horas después. "Me desperté con fiebre, escalofríos e insomnio", recuerda Henningsen.
Dos horas después, la doctora presentaba "una mejora en la fiebre y los escalofríos", pero, cuando se despertó, "los dolores musculares persistieron y apareció también el de cabeza, similar al que sentiría al saltar mi café matutino". A las 20 horas -de haber recibido la vacuna-, "todavía tenía dolor de cabeza y la fiebre y los escalofríos regresaron y persistieron durante todo el día, junto con el agotamiento y una sensación general de bah". Tras el transcurso de 32 horas, "todavía tenía dolor de cabeza, fiebre y escalofríos cuando me fui a la cama".
Dos días después de la inyección, la doctora se despertó "sudando, probablemente por escalofríos y sudores nocturnos leves". "Me subí a la báscula y vi que había perdido alrededor de 1,8 kilos desde que me pesé la mañana de la inyección el 7 de enero. Esta pérdida pudo deberse en parte a la deshidratación y, por otro lado, como efecto secundario de mi cuerpo luchando contra lo que se pensaba que era la covid19". Pero al cumplirse las 48 horas, la doctora se sentía "totalmente normal".
Tres días después la inyección, la sanitaria recuperaba la normalidad. "Me sentí bien todo el día. Hice ejercicio por la mañana y la mayor parte del peso volvió cuando aumenté mi ingesta de agua", comenta al respecto.
"En general, todos mis síntomas fueron leves y un precio muy bajo a pagar por la protección contra covid19. Creo que la incomodidad temporal no debería ser un impedimento para recibir la vacuna, y sé que estos síntomas son una señal de un sistema inmunitario robusto y que mi cuerpo se está preparando para combatir el coronavirus, exactamente lo que se supone que debe hacer", resume la doctora Henningsen.