Primero fue con AstraZeneca, y ahora con Janssen: Dinamarca anuncia que dejará de incluir la vacuna contra la covid-19 de la compañía Johnson & Johnson en su programa de inmunización ante el posible vínculo del fármaco con los extraños eventos trombóticos detectados.
La Agencia del Medicamento Europeo (EMA), así como las autoridades sanitarias de EEUU, dieron luz verde a su utilización, afirmando que “los beneficios son mayores que los riesgos y la vacuna de Janssen es efectiva para luchar contra la covid”, si bien reconocieron que "existe relación posible entre la ocurrencia de trombocitopenia y la vacunación" con el suero de la compañía, al igual que hiciesen en el caso de AstraZeneca. Insistieron, eso sí, en que las probabilidades son ínfimas y que son efectos "muy extraños", que se producen raramente.
Con todo y con ello, las autoridades sanitarias de Dinamarca han resuelto que el fármaco no forme parte de su estrategia de vacunación. "No se puede compensar el riesgo de posibles efectos secundarios como coágulos sanguíneos graves en los vacunados", ha señalado la subdirectora de la Junta Nacional de Salud danesa, Helene Probst, en un comunicado, recogido por el diario 'Politiken'.
Según la Junta Nacional de Salud, el programa de vacunación contra la COVID-19 sufrirá retrasos por la decisión, como ya había pasado previamente con la suspensión del uso de la vacuna de AstraZeneca, que causa el mismo efecto secundario. Así, la inmunización de los jóvenes de 25 a 39 años se retrasará cuatro semanas.
Había solicitado más dosis de Janssen que de ninguna otra
Precisamente, Dinamarca había solicitado más dosis de la vacuna de Johnson & Johnson que de ninguna otra: ocho millones, ya que cuenta con la ventaja de una inmunización completa contra la enfermedad con la administración una sola dosis, algo que a priori consideraban fundamental para agilizar la lucha contra la covid-19.
En este contexto, y ante la disponibilidad de dosis de AstraZeneca y Johnson & Johnson en el país europeo, el Parlamento de Dinamarca ha acordado que los ciudadanos puedan elegir si recibir alguna de las dos, incluso aunque ya no estén incluidas en el plan de vacunación. Las autoridades danesas esperan que este modelo opcional y voluntario comience en mayo.
Hasta el momento, las autoridades sanitarias de Dinamarca han contabilizado más de 253.000 personas contagiadas de COVID-19 desde que comenzó la pandemia, incluidas más de 2.400 víctimas mortales a causa de la enfermedad.