El reencuentro entre los príncipes Guillermo y Harry se convirtió en uno de grandes focos de atención para millones de espectadores que siguieron por televisión el funeral del abuelo de los dos hermanos, el duque de Edimburgo, tras la animosidad surgida entre ambos por la entrevista del menor junto a su esposa, Meghan Markle, en la que criticó abiertamente a la familia real.
A la salida del funeral del príncipe Felipe los dos hermanos y la esposa del mayor, Kate Middleton, intercambiaron algunas palabras y de hecho se dirigieron juntos hacia los aposentos privados de la familia en el castillo de Windsor. Guillermo parecía llevar la voz cantante, mientras Enrique escuchaba cabizbajo, cubierto todavía por una mascarilla.
24 horas después se ha desvelado el contenido de la conversación que los hermanos mantuvieron de manera pública gracias a que unos expertos en lectura de labios, requeridos por el 'Daily Express', han logrado descifrar qué se dijeron. Según estos expertos, cuando el duque de Cambridge, de 38 años, se quitó la mascarilla, dijo: "Sí, fue genial, ¿no?". El duque de Sussex, de 36 años, pareció responder: "Fue como él quería".
Cuando salieron de la capilla de San Jorge, Guillermo y Harry hablaron brevemente con el arzobispo de Canterbury. Guillermo le dijo a su hermano después de la charla: "Un servicio absolutamente precioso, ah, la música".
Poco después de eso, Harry y William comenzaron a caminar juntos hacia el castillo con Kate Middleton a su lado. Luego se vio a la duquesa de Cambridge hablando con la condesa de Wessex, dejando a los hermanos solos, caminando y hablando entre ellos.
La analista de lenguaje corporal Adrianne Carter explicó que parecían estar tranquilos. "Kate parecía tomar la iniciativa en la charla, pero cuando los hermanos comenzaron a caminar juntos fue completamente natural sin signos de estrés o discordia en su compañía. No hubo ningún espectáculo forzado ni señales de evitarse el uno al otro. De hecho, Guillermo hizo una pausa para que Harry pudiera caminar colina arriba con ellos. Me parece que el dolor los ha reunido", dijo Carter.
Según el diario Daily Telegraph, Guillermo ya habló por teléfono con Harry a su llegada al Reino Unido el pasado domingo, si bien hasta este sábado no habrían podido encontrarse en persona, pues Harry tuvo que guardar la obligatoria cuarentena en Frogmore Cottage, su antiguo hogar en Windsor.
Fuentes citadas por dicho diario insistían en que los dos hermanos aparcaron sus diferencias: "Todo el foco está centrado en la reina. No hay excepciones. Una familia unida".