Japón ha detectado una nueva variante de coronavirus importada a la isla a través de cuatro viajeros llegados de Brasil. Se trata de una nueva cepa diferente de las que ya han identificado en Gran Bretaña y Sudáfrica, aunque las tres comparten alguna mutación común, según ha informado Takaji Wakita, director del Instituto Nacional de Enfermedades Infecciosas de Japón (NIID).
El Ministerio nipón de Salud nipón está investigando las características de la nueva mutación para determinar la gravedad de los síntomas que causa y hasta qué punto las vacunas existentes son efectivas para detener su propagación.
Según 'The Japan Times', entre los viajeros afectados que llegaron de Brasil figura un hombre de unos 40 años con dificultades respiratorias que tuvo que ser hospitalizado, una treinteañera con síntomas leves, como dolores de cabeza, y dos personas de entre 10 y 19 años: un chico con fiebre leve y una chica asintomática.
Los enfermos dieron positivo por covid-19 en el aeropuerto, después de lo cual se sometieron a un examen más detallado que puso al descubierto la nueva cepa mutada. Desde el NIID subrayan que, por el momento, no existe evidencia de que la nueva variante sea altamente infecciosa.
El 14 de diciembre, las autoridades británicas informaron a la OMS de la detección de una nueva cepa del coronavirus. Según los resultados de los análisis iniciales, la llamada SARS-CoV-2 VUI 202012/01 es capaz de propagarse más fácilmente que la ya existente.
Para entonces, la nación insular ya había confirmado 1.108 casos de infección con la nueva variante. Posteriormente, la VUI 202012/01 también se detectó en Australia, Dinamarca, Italia, Islandia y los Países Bajos, entre otros.
Ante el temor a una mayor propagación, las autoridades de varias decenas de países del mundo suspendieron el tráfico aéreo con Reino Unido. En la mayoría de los casos, esta variante afecta principalmente a personas menores de 60 años.
Menos de una semana después, el ministro de Salud de Sudáfrica, Zweli Mkhize, anunció la identificación de otra variante del virus que recibió la denominación temporal de 501.V2 y que se está propagando de una forma más rápida que la de la primera ola. La OMS ha confirmado que la mutación detectada en Sudáfrica y la del Reino Unido se originaron por separado.
Un estudio de científicos norteamericanos aún sin confirmar asegura que la vacuna de Pfizer y BioNtech contra la covid-19 podría se útil contras las nuevas cepas del SARS-CoV-2 detectadas en el Reino Unido y Sudáfrica.
Las conclusiones preliminares de los investigadores de la Universidad Texas recogidas por Daily Mail, coinciden con otras informaciones, en este caso del diario británico The Times en el que el director general de la farmacéutica AstraZeneca, Pascal Soriot, afirma estar convencido de que la vacuna que ha desarrollado su empresa es eficaz contra la nueva cepa de coronavirus detectada en la región de Londres y que es un 70 por ciento más contagiosa que la original.
Por el momento, según la información que los científicos disponen hasta ahora, nada parece indicar que tanto la variante británica como la detectada en Sudáfrica sean resistentes a las vacunas desarrolladas para combatir el SARS-CoV-2.
"No tenemos indicios de que haya un impacto en las vacunas que se están administrando. Esa es la información que tenemos hasta ahora y las investigaciones siguen en curso", señaló la responsable técnica contra la covid-19 de la Organización Mundial de la Salud (OMS), Maria Van Kerkhove en el encuentro semanal de expertos de esa agencia de Naciones Unidas con internautas.