El presidente de Rusia, Vladimir Putin, cada vez está más solo, dentro y fuera de sus fronteras. Algunas fuentes señalan que hay gente en su entorno que no aprueba la guerra en Ucrania. Una empresa de inteligencia va más allá y señala que el mandatario ruso podría ser apartado del poder en dos años. Antes, otras fuentes han señaladoVladimir Putin no está siendo "completamente informado" de la evolución de la guerra de Ucrania. Algunos de sus asesores de Denfensa tendrían miedo a contarle la verdad sobre los comabtes.
El comportamiento "tóxico" de Vladimir Putin amenaza a su círculo íntimo en Moscú, cuenta el diario The Mirror La empresa de inteligencia Dragonfly ya predijo que Rusia invadiría Ucrania y ahora vaticinan que Vladimir Putin podría ser derrocado si Occidente aumenta unas sanciones porque estas van camino de provocar una crisis financiera en el país.
De hecho tras lo sucedido en Bucha, ciudad masacrada, donde los cadáveres de los civiles se cuentan por cientos en las calles tras la salida del Ejército de Rusia, podría hacer que la Unión Europea lance el quinto paquete de sanciones.
Estas sanciones dañan a las empresas rusas, que cada vez presionan más a Vladimir Putin. Los analistas de inteligencia de esta empresa afirman que "es muy probable que el presidente Vladimir Putin no esté en el puesto que ocupa en los próximos dos años".
Según Dragonfly, el destino de Vladimir Putin está en manos de seis personas: Sergei Naryshkin, jefe del servicio de inteligencia exterior; el ministro de Defensa Sergei Shoigu; el exjefe del servicio de seguridad interna del FSB Alexander Bortnikov; el jefe del Consejo de Seguridad de Rusia Nikolai Patrushev; el jefe de la empresa estatal Rostec, Sergei Chemezov y el oligarca Igor Sechin. Hasta ahora todos sus personas más cercanas.
La empresa no habla de un golpe mililar, sino más bien de “un grupo de hombres con trajes entrando al Kremlin. Entonces se explicará que el presidente Putin está enfermo o que tiene que renunciar por otras razones, como familiares".
De hecho, desde que comenzó la guerra de Ucrania hay cada vez más rumores sobre su salud, también mental. Además, algunos medios rusos señalan que Vladimir Putin tiene dos enfermedades graves que, debido al tratamiento, le hacen tener cambios de humor, de comportamiento y confusión. El Kremlin lo ha negado todo hasta ahora.