La pandemia del nuevo coronavirus originada en la ciudad china de Wuhan se acerca ya los 2,4 millones de casos y deja más de 160.000 víctimas mortales en 185 países del mundo, de nuevo con Estados Unidos marcando máximos de casos diarios.
Este domingo, Estados Unidos superó los 40.000 fallecidos por el coronavirus tras la confirmación de 41.379 decesos por parte de los distintos niveles administrativos que ha recopilado la Universidad Johns Hopkins.
En cuanto a los positivos confirmados, hay 746.379 casos en los 50 estados, el Distrito de Columbia y otros territorios. Además incluye a los nacionales repatriados.
A pesar de ser el país con más fallecidos y más contagiados de todo el mundo, decenas de manifestantes en EEUU están protestando en los últimos días, en diferentes estados, contra el confinamiento por la pandemia.
Los participantes se suelen reunir para expresar su descontento por el cierre de los negocios no esenciales y por la cuarentena decretada. Así, gritan consignas como "acaben el confinamiento" y acuden con pancartas que rezaban el mensaje "no cumpliremos".
El pasado miércoles miles de manifestantes, la mayoría partidarios del presidente Donald Trump, protestaron con una reivindicación en el estado de Michigan, donde desde sus vehículos en las calles aledañas al Congreso estatal, situado en Lansing, exigen al Gobierno el retorno a la actividad económica plena a pesar del virus.
El presidente de Brasil, Jair Bolsonaro, ha participado en una manifestación convocada en las redes sociales en la que se ha pedido una "intervención militar" debido a las decisiones y posturas adoptadas por algunas autoridades del país, contrarias a la gestión del Gobierno en la crisis provocada por el Covid-19.
Subido en lo de alto de una furgoneta, Bolsonaro se ha dirigido a los centenares de seguidores que se amontonaban, rompiendo así las recomendaciones de la Organización Mundial de la Salud (OMS) de b en frente del Cuartel General del Ejército en Brasilia, en donde han coreado incluso cantos a favor de leyes de la dictadura militar con las que se perseguía a los disidentes políticos.
"Tenemos un nuevo Brasil por delante. Todos, sin excepción, tienen que ser patriotas, creer, y dar de su parte para que podamos volver a poner a Brasil en el lugar en el que merece", ha dicho el presidente de extrema derecha, al que se le ha visto toser en varias ocasiones."
Unas 2.000 personas se han concentrado este domingo en la plaza Rabin de Tel Aviv para denunciar el bloqueo político que sufre Israel desde hace meses. Los asistentes han participado de forma disciplinada, alineados para respetar la distancia mínima y evitar contagios.
Es una nueva convocatoria de "bandera negra" como se conocen en Israel, y de nuevo la corrupción, el sistema político vigente y el primer ministro Benjamin Netanyahu como personificación de todo ello han estado en el centro de las denuncias.
El líder del partido Yesh Atid, Yair Lapid, ha acusado a Netanyahu de "destruir la democracia" en Israel con el apoyo de Benny Gantz, antiguo aliado electoral de Lapid. "Se pelean por entrar en el Gobierno. Se cuentan películas. Se dicen 'lucharemos desde dentro'. No vais a luchar desde dentro. No se combate la corrupción desde dentro. Si estás dentro, eres parte de ella", ha reprochado.