Uno de los mayores frentes de batalla en la guerra frente al coronavirus está siendo la lucha por conseguir material sanitario. Mascarillas, respiradores... y el problema es su escasez. En este aspecto, políticos de Francia y Alemania han acusado a EEUU de practicar métodos "piratas" y típicos del "Salvaje Oeste" para obtener este tipo de materiales.
El primero en alzar la voz fue el ministro del Interior de Berlín, Andreas Geisel, que denunció en un comunicado que 200.000 mascarillas habían sido confiscadas por EEUU en Bangkok.
"Vemos esto como un acto de piratería moderna", aseguró tras explicar que fueron ordenadas a una empresa estadounidense y pagadas. "No es así como se trata a los socios transatlánticos. Incluso en tiempos de crisis global, no deberíamos regirnos por los métodos del Salvaje Oeste", continuó.
De hecho, apremió al Gobierno alemán a exigir a los estadounidenses que respeten las normas internacionales.
En Francia, tres presidentes regionales, Jean Rottner (Gran Este), Renaud Muselier (Provenza-Alpes-Costa Azul) y Valérie Pécresse (Isla de Francia), también han salido al paso asegurando que EEUU está pagando más y en metálico para requisar los envíos de mascarillas que van rumbo al país galo.
En una entrevista a RT, Renaud Muselier denunció este miércoles que en China, "directamente en la pista", los estadounidenses compraron un pedido francés pagando en efectivo, por lo que el avión que debía partir hacia Francia se dirigió a EE.UU.
"Gente va a morir a corto plazo por falta de camas y de respiradores. Lo que está sucediendo con los estadounidenses es bastante terrible, pueden, en la pista, recomprar cargas enteras, pagando en efectivo", declaró Jean Rottner en RMC.