Los príncipes Guillermo y Harry aparecieron el jueves en público para inaugurar en el Palacio de Kensington una estatua de su madre, Diana de Gales, con motivo de su 60º cumpleaños, y ambos expresaron su deseo de que su madre "estuviera aún" con ellos. La presentación de la estatua, comisionada por los príncipes en 2017, tuvo lugar en una ceremonia íntima y con una asistencia reducida debido a la pandemia.
Sin embargo, los medios de comunicación británicos han querido conocer todo lo que paso entre los hermanos en este especial e íntimo evento. Para ello, el periódico 'Mirror' se ha puesto en contacto con un experto no verbal y especialista en la lectura de labios. Jeremy Freeman, el experto en lenguaje no verbal, ha analizado las imágenes en las que aparecen los dos hermanos y ha logrado saber qué se dijeron en esta ceremonia.
El más impresionado con la figura de Diana de Gales fue el príncipe Harry que nada más ver la estatua declaró: "¡Guau! ¿No es asombroso?". Por su parte, su hermano Guillermo le respondió: "Qué revelación. Está bien. Está bien". Tras escuchar estas palabras, el príncipe Harry volvió a dejar claro su asombro al ver la figura de su madre: "Increíble".
En la ceremonia, Guillermo y Harry, que se reunieron en público por primera vez desde el funeral de su abuelo, Felipe, que tuvo lugar en abril, manifestaron que les gustaría que el memorial permita a sus visitantes reflexionar acerca de la "vida y el legado" de Diana de Gales, que murió en 1997.
En un comunicado, los hermanos han indicado que, el día en el que su madre habría cumplido 60 años, recuerdan "su amor, su fuerza y su carácter", cualidades que hicieron de ella "una fuerza del bien alrededor del mundo, cambiando incontables vidas para mejor".
"Cada día, desearíamos que aún estuviera con nosotros, y nuestra esperanza es que esta estatua sea vista para siempre como un símbolo de su vida y su legado", han agregado en el texto, en el que han agradecido su trabajo a los artífices del memorial y los donantes que lo han hecho posible.
La estatua, creada por Ian Rank Broadley, cuyo retrato de la reina Isabel II figura en todas las monedas de Reino Unido, se ha mantenido en secreto antes de la ceremonia. Refleja a Diana con un vestido rodeada de tres niños y estará en un jardín del Palacio de Kensington, uno de los lugares favoritos de Diana, donde vivió durante 16 años. A juicio del Palacio de Kensington, muestra "la calidez, la elegancia y la energía" de Diana, además del "impacto universal y generacional" de su trabajo.
La relación entre Harry y su familia se ha deteriorado, sobre todo después de que el duque y su mujer, Meghan Markle, la duquesa de Sussex, abandonaran la familia real británica.
Harry y Meghan --el primer miembro de la casa real británica birracial-- concedieron una entrevista a Oprah Winfrey, que se emitió en marzo, en la que arremetieron contra la familia real británica, a la que acusaron, entre cosas, de racismo.