Miles de personas han vuelto a salir a manifestarse en Santiago, Chile. Algunos de ellos incendiaron barricadas y se enfrentaron a las fuerzas de seguridad, este viernes.
La tensión sigue siendo alta en el país iberoamericano. Mientras, los chilenos continúa movilizándose para exigir avances democráticos y mejoras en las condiciones de vida, especialmente la reducción de las desigualdades, muy acuciantes, entre ricos y pobres.
La manifestación del viernes culminó pacíficamente en un gran concierto con grupos musicales en la Plaza de Italia de Santiago, el lugar donde se han celebrado algunas de las mayores protestas de la capital chilena.
El gobierno chileno ha prometido una serie de reformas para sofocar las demandas de los manifestantes, desde aumentar el salario mínimo hasta completar las pensiones.