Los 39 muertos hallados este miércoles en el interior de un camión frigorífico en Essex, en el sur de Inglaterra, eran de nacionalidad china, según informa este jueves la cadena de televisión ITV News. Las condiciones en las que se encontraban en el contenedor eran inhumanas. Según las investigaciones los 39 muertos vivieron sus últimos instantes entre la oscuridad, temperaturas increíblemente frías que pudieron alcanzar lo 25 grados bajo cero, una temperatura que provoca que los humanos "pierdan la vida bastante rápido".
La Policía ha registrado este jueves dos direcciones en Co Armagh, en Irlanda del Norte, que estarían relacionadas con el conductor del camión, que se encuentra detenido y al que la cadena de televisión las identifica como Mo Robinson, de 25 años. El camionero está siendo interrogado por la Policía de Essex por presunto homicidio.
Entretanto, los forenses ya están trabajando en la identificación de los 39 fallecidos, todos ellos mayores de edad salvo un adolescente. El camión y el remolque han sido trasladados ya a un lugar seguro desde el parque industrial en Grays en el que fueron halladas las víctimas.
Los servicios de emergencia respondieron a un aviso en la madrugada del miércoles en la localidad de Grays y, al abrir el camión, hallaron los cuerpos. Los investigadores apuntaron inicialmente que el vehículo había entrado a través de Gales, pero posteriormente determinaron que el trailer llegó al puerto inglés de Purfleet desde Zeebrugge (Bélgica), mientras que el camión lo hizo desde Irlanda del Norte.
La Fiscalía de Bélgica ha informado de que ha abierto una investigación en relación con el caso que se centrará "en los organizadores y todas las demás partes implicadas en este transporte".
"Los resultados preliminares de la investigación muestran que el container en cuestión llegó a Zeebrugge a las 14.49 horas del 22 de octubre y abandonó el puerto esa tarde para llegar a Purfleet el 23 de octubre a 1.00", ha señalado en su comunicado.
"No está claro cuándo las víctimas fueron introducidas en el contenedor y si esto ocurrió en Bélgica", ha subrayado la Fiscalía belga, que se ha comprometido a trabajar en "estrecha colaboración" con la Policía y las autoridades judiciales británicas.