La cocaína ha desplazado al Brexit en el Parlamento británico y se ha convertido en la auténtica protagonista del lugar. Después de que el ex ministro de Medio Ambiente Michael Gove reconociera que había esnifado esta droga, una investigación de VICE ha revelado que nueve áreas dentro del palacio de Westminster contenían restos de estupefacientes.
En concreto, VICE realizó controles antidrogas en varias estancias privadas del Parlamento británico, a las cuales tan solo pueden acceder los políticos y trabajadores del lugar. De las nueve analizadas, cuatro dieron positivo. La peor área de todas, el cuarto de baño situado al lado de Stranger’s Bar, uno de los diferentes restaurantes que hay en el lugar.
Otras de las áreas que dieron positivo fueron los baños para discapacitados fuera de The Woolsack, otro de los bares que hay dentro del Palacio de Westminster, así como otros servicios fuera de las oficinas. Sin embargo, desde el Parlamento echan la culpa a los turistas.
“El Parlamento toma muy en serio el tema del abuso de sustancias y ofrece una gama de servicios de asistencia social para quienes lo necesitan. Es un lugar público y damos la bienvenida a más de un millón de visitantes al año que tienen acceso a las instalaciones”, ha asegurado un representante.
Los parlamentarios parecen pasarse unos a otros las sustancias estupefacientes. Todo comenzó con Michael Gove, ex ministro de Medio Ambiente, quien admitió haber consumido cocaína habitualmente. “Pero fue antes, en mi vida como periodista, y no cuando me dediqué a la política”, declaró el 8 de junio.
Tras él, comenzaron a salir carpetas y archivos sobre el consumo de estupefacientes de los políticos. El candidato mejor situado para sustituir a May como primera ministra, Boris Johnson, se unía a Gove. “No me acuerdo bien. Ocurrió mientras estudiaba en la universidad. Aspiré coca, pero creo que estornudé o algo ocurrió, porque no llegó a subir por la nariz.
El ministro de Desarrollo Internacional, Rory Stewart, y el opio; la ex portavoz del Gobierno en el Parlamento Andrea Leadson y la mariguana; los miembros del partido conservador Jeremy Hunt y Dominic Raab; y el secretario de estado para la Salud, Matthew Hancock, son otros de los políticos que forman parte del club, al que parece, se ha unido medio hemiciclo parlamentario.