Trágico suceso ocurrido en Louth, una localidad situada en el condado de Lincolnshire, Inglaterra. Allí, un hombre, de 30 años, ha apuñalado hasta la muerte a su exnovia, Bethany Vincent, de 26 años, y al hijo con autismo de esta, Darren Henson, de solo nueve años de edad, por temor a que el autismo del pequeño fuese "contagioso".
El hombre asestó hasta nueve puñaladas a su expareja, una de ella tenía 20 cm de profundidad y le atravesó el corazón. Mientras que el pequeño recibió hasta 14 puñadas en cara, cuello, pecho, pierna, hombro y espalda.
Tras lo ocurrido, el hombre, Daniel Boulton, huyó. Estuvo en búsqueda y captura por la policía durante 24 horas. En su huida, asaltó una cabaña para robar alcohol y comida y también apuñaló a un oficial de policía fuera de servicio en una pierna.
Después, intentó robar dos coches para continuar esquivando a los agentes, pero consiguieron pararle utilizando una pistola taser. Finalmente fue detenido por los agentes y llevado ante la justicia, donde un jurado le ha considerado culpable del doble asesinato. El magistrado a cargo de la investigación, el juez Pepperall, se dirigió al acusado con estas palabras: "Estoy seguro de que apuñaló a DJ -el hijo de su expareja- por odio y lo motivó su autismo", según DailyMail.
Ahora se enfrenta a una pena de prisión de, al menos, 40 años, lo que podría suponer que Boulton nunca pueda salir de la cárcel. La Policía de Lincolnshire detalló la sentencia de Boulton a través de su perfil oficial de Twitter.