¿Qué grado de conocimiento se tiene en España y Marruecos del Desastre de Annual transcurrido exactamente un siglo? En general, historiadores y escritores de las dos orillas que dedicaron parte de sus carreras a estudiar las guerras de Marruecos y el Protectorado y, de manera particular, una batalla que costó la vida a más de 10.000 soldados españoles en tierras del Rif entre el 22 de julio y el 9 de agosto de 1921 creen que el conocimiento es escaso, aunque reconocen el notable esfuerzo de ciertas editoriales, universidades y medios de comunicación por rescatar del olvido aquellos hechos.
El volumen ‘A cien años de Annual. La guerra de Marruecos’ (Desperta Ferro), publicado en mayo de este año, es el mayor esfuerzo hasta la fecha en relación a Annual y su contexto histórico, causas y consecuencias para España. Otras obras de este año al margen de la universidad son ‘El desastre de Annual’ (Almuzara), del escritor Gerardo Muñoz Lorente, ‘El vuelo de los buitres’ (Galaxia Gutenberg), obra póstuma de Jorge Martínez Reverte o ‘El prisionero de Annual’, del periodista Alfonso Basallo.
El diplomático Julio Albi de la Cuesta, uno de los autores que contribuye al citado volumen colectivo, opina a NIUS que no se han conmemorado los hechos “de forma significativa, lo que no deja de ser sorprendente habida cuenta de las profundas repercusiones de muy diversa índole que tuvieron en la Historia de España aquellos aciagos días”. Un convencimiento semejante tiene el escritor Lorenzo Silva. “Salvo honrosas excepciones, lo que se ha hecho no es suficiente para el valor que tiene este acontecimiento en la historia de España”, estima el novelista a NIUS.
Desde Marruecos, el historiador Mohammed Kharchich tiene una opinión semejante en relación a la conmemoración de la efeméride, la ‘epopeya de Annual’ para la historiografía local. “Es insuficiente teniendo en cuenta la importancia histórica de este período de la historia marroquí”, reconoce a NIUS el investigador de la tetuaní Universidad Abdelmalek Essaadi y especialista en historia rifeña, aunque precisa que “la mayoría de archivos relevantes de este período se encuentran en España y Francia, y es hora de descolonizar nuestros archivos”.
Por su parte, el también historiador marroquí Mimoun Aziza confirma que “a nivel oficial el acontecimiento ha pasado desapercibido en Marruecos”. El investigador de la Universidad de Mequínez, autor de ‘La sociedad rifeña frente al Protectorado español de Marruecos (1912-1956)’, recuerda a NIUS que hubo “una pequeña celebración oficial organizada por el Alto Comisionado para los ex combatientes de la Resistencia y los miembros del Ejército de Liberación en la provincia de Driouch [cerca de Nador, región del Oriental marroquí]”. En cambio, mayor ha sido la repercusión por parte de la sociedad civil local, con “docenas de asociaciones que organizaron actos de celebración y de conmemoración de la batalla de Annual”.
Para el historiador Eloy Martínez Corrales, uno de los mayores especialistas españoles en relaciones hispano-marroquíes, el Desastre de Annual no es un hecho para “conmemorar sino para reflexionar”. A juicio del investigador de la Universitat Pompeu Fabra de Barcelona, “la opinión pública española ha olvidado de aquello y en Marruecos también, aunque allí hay sectores que están utilizando ese asunto con fines más relacionados con el hoy que con el ayer”.
En efecto, si en España, al margen de la reciente bibliografía publicada, numerosos han sido los artículos aparecidos en medios de comunicación en las últimas semanas, en el Marruecos institucional la efeméride ha pasado casi inadvertida. Quizás la explicación estribe, como apunta Aziza, en que, aunque “los marroquíes y principalmente los rifeños están orgullosos de la victoria en la batalla, siempre hubo una reticencia oficial, seguramente porque es gracias a la victoria de Annual que Abdelkrim El Jatabi fue mundialmente conocido y es un hecho que, en el fondo, molesta al Majzén marroquí”.
Entre los medios de comunicación, el digital oficialista Le360 dedicaba hace un mes un artículo firmado por su columnista Mouna Hachim en el que, tras hacer un breve apunte sobre los hechos y también sobre la reciente bibliografía española sobre Annual, se subrayaba: “A partir de esta fecha, aquí y allí, tantas guerras abiertas y paces desacertadas, tanta sangre derramada y de enfrentamientos absurdos sin que nunca mueran los sueños de paz y libertad”.
Por su parte, el digital anglófono Morocco World News dedicaba el jueves pasado una extensa tribuna de la joven historiadora marroquí Safae Daoudi Sanae Ziadi a los hechos en la que se animaba a los marroquíes a “celebrar la memoria de Abdelkrim El Jatabi, líder heroico que luchó contra la expansión colonial”. “La conmemoración debe inspirar a los jóvenes y mayores a aprender más sobre la historia de la lucha de Marruecos por la independencia y sobre una rica historia que es a menudo poco estudiada y descuidada”, concluía la autora.
El escritor Lorenzo Silva lamenta especialmente que las autoridades españolas, tanto nacionales como autonómicas, hayan dejado pasar la ocasión de recordar los hechos y homenajear a los españoles caídos en la batalla. “Veo una clamorosa ausencia de conmemoración institucional. Sin interpretación adecuada del episodio, el terrible coste que tuvo, lo desatendidas que quedaron las víctimas y sus familias, las repercusiones que tuvo en el cambio de régimen, nuestra memoria histórica reciente está bastante coja”, reflexiona el novelista a NIUS. Ni el Ministerio de Defensa español ni el Ejército han recordado la masacre del verano de 1921.
“Hay una desidia incomprensible respecto al sufrimiento de esas personas que estuvieron allí sin comerlo ni beberlo y perdieron la vida por las malas decisiones de los gobernantes españoles y una falta de reconocimiento, que fueron bastantes más que los del Regimiento de Alcántara. No tenemos ni sus nombres, nada”, deplora el autor de libros relacionados con Marruecos y el Protectorado español como ‘Del Rif al Yebala’ y ‘Siete ciudades en África’.
A juicio de Silva, “la ignorancia, desidia, comodidad, falta de compromiso con la conciencia colectiva, falta de sentido comunitario y que mucha gente prefiere no meterse en líos” explican que la efeméride haya pasado inadvertida para las instituciones, lo que habla “de un músculo cívico muy destensado”. “Hace mucho tiempo de aquello, pero si nunca levantamos una conciencia de lo que sucedió y el impacto de lo que ocurrió después, cómo vamos a entender el país en el que vivimos”, zanja el novelista.
“Creo que aquí puede aplicarse el refrán ‘ir por lana y volver trasquilado’. Eso es lo que sucedió a los españoles. En cuanto a los marroquíes, es evidente que se arrogaron el triunfo, magnificándolo, cuando en realidad lo que se conoce como ‘el pánico de Annual’ fue determinante en la derrota de los unos y del triunfo de los otros’”, explica a NIUS la historiadora María Rosa de Madariaga, una de las figuras más importantes de la investigación académica sobre el Protectorado español, las relaciones hispano-marroquíes y la historia del país magrebí.
“No hubo lucha o muy poca, sino huida de unas tropas, a las que se llevó irresponsablemente al matadero. Españoles y marroquíes deben hoy reflexionar sobre aquellos hechos luctuosos y tratar de entenderlos sin dejarse intoxicar por nacionalismos que los distorsionan”, reflexiona la autora de ‘Marruecos, ese gran desconocido. Breve historia del Protectorado español’, ‘En el barranco del lobo: las guerras de Marruecos’ o ‘Abd el-Krim El Jatabi. La lucha por la independencia’.
Las grandes lecciones de Annual para el historiador Eloy Martín Corrales es que “con los vecinos hay que ser cuidadosos y pulcros, también la otra parte debe serlo, lo que no siempre ocurre, como nos demuestra lo ocurrido en Ceuta recientemente” y “evitar situaciones que nos lleven a callejones sin salida, pues las relaciones con los vecinos nunca deben ser de imposición, sabiendo muy bien que las relaciones que intentan ser cooperativas o solidarias no tienen por qué funcionar”.
En los últimos años “España ha hecho esfuerzos” para tener buenas relaciones con Rabat, asegura a NIUS el autor de ‘España frente a la independencia de Marruecos’ y ‘Marruecos y el colonialismo español, 1859-1912: de la guerra de África a la ‘penetración pacífica’. En opinión del investigador de la UPF nuestro país debe ser “solidario y cooperar en todo lo que podamos” con Marruecos, aunque reconoce que la cuestión del Sáhara Occidental seguirá siendo un obstáculo.
Para el experto en historia militar Julio Albi de la Cuesta, el gran aprendizaje de la tragedia del verano de 1921 es que “a los dos países les interesa mantener una relación franca, estrecha y cordial, basada en el respeto mutuo”.
Desde el lado marroquí, el historiador Mimoun Aziza cree que la principal lección de los hechos de Annual es que “hay que respetar la voluntad de los pueblos aunque sean pequeños”. Para el investigador Mohamed Kharchich, “hace falta enfocar el problema con lucidez basándonos sobre una lectura serena de la historia y fundamentalmente sobre las consecuencias desastrosas de la utilización abusiva de gases tóxicos [en alusión al uso de armas químicas por parte del Ejército español durante la guerra del Rif] contra la población civil”.
Coinciden unos y otros, intelectuales, historiadores y escritores de uno y otro lado del Estrecho, en que un mejor conocimiento de la historia hispano-marroquí ayudará a no repetir errores del pasado y reducir al máximo los conflictos entre Rabat y Madrid. En este sentido, Kharchich propone la reactivación del Comité Averroes para “promover la cooperación y la entente entre los dos pueblos vecinos sobre la base del respeto mutuo”.
Cien años se cumplieron este jueves del inicio de una catástrofe humana que podría haberse evitado si los gobernantes españoles de la época habrían hecho caso a quienes advertían de los riesgos. Fue el caso del comandante de caballería José Álvarez Cabrera, quien advertía en el estudio titulado ‘Acción militar de España en el Imperio de Marruecos: Bosquejo de un plan de campaña’, impreso en 1898 con escasa circulación, de la “insigne locura” de “penetrar por terrenos desconocidos o ásperos y sin recursos”: “No creemos, dadas las condiciones de la región geográfica que se conoce con el nombre de ‘El Rif’, el que las naciones europeas conviniesen nunca en desembarcar sus efectivos en aquellas montañas inaccesibles, hacerlo sería un grave error político y, sobre todo, militar”.
Tampoco se escuchó al periodista y diplomático Ángel Ganivet, quien desde Helsinki lo había avisado antes, en 1896, en su Idearium español: “¿Puede darse absurdo mayor que una empresa colonial de España en África?”. Entretanto recordamos la lejana tragedia en las montañas del Rif y Annual regresa a las imprentas españolas, el verano de 2021 avanza irremisiblemente en medio de una nueva vieja crisis entre los dos vecinos a pesar de las lecciones supuestamente aprendidas. “Las relaciones de España con Marruecos no son fáciles y atraviesan crisis periódicas. La geopolítica manda”, recuerda María Rosa de Madariaga.