Alexei Navalni acusa a Putin de su envenenamiento: "Entendí que me estaba muriendo"

  • "Culpo directamente al presidente Putin de un acto de terrorismo de estado"

  • Navalni denuncia que han intentado envenenarle en otras tres ocasiones

  • Afirma que buscaban una muerte lente para no levantar sospechas

Alexei Navalni, líder opositor ruso ha descrito en Informativos Telecinco cómo fue el momento en el que el veneno que asegura le suministraron agentes secretos a las órdenes de Vladimir Putin presidente de Rusia, empezó a actuar en su cuerpo: "Fue un momento terrible, muy complicado de describir. No sentía dolor, pero algo peor y entendí que me estaba muriendo".

Entrevistado en directo por Pedro Piqueras para Informativos Telecinco. Navalni ha mostrado su temor a que las autoridades rusas tomen represalias por su denuncia contras las autoridades rusas pero asegura, que su responsabilidad es volver y denunciar en Rusia las agresiones contra el pueblo.

No es la primera vez que Navalni señala al Kremlin. El pasado mes de octubre, nada más recuperarse de los efectos del veneno en su organismo, el opositor ruso aseguró que el presidente de Rusia, Vladimir Putin, estaba "detrás" del envenenamiento que sufrió el 20 de agosto. "No veo otra explicación", aseguró.

Navalni de 44 años, que llegó a estar en coma como consecuencia del envenenamiento, pasó 32 días ingresado en el hospital Charité de Berlín, al que fue trasladado el 22 de agosto.

Expertos alemanes, franceses y suecos concluyeron que Navalni fue intoxicado con un agente nervioso de tipo Novichok, pero las autoridades rusas han negado cualquier responsabilidad y han acusado a las alemanas de entorpecer las pesquisas sobre el caso.

Según ha relatado sobre su repentino empeoramiento en un vuelo que le trasladaba de Siberia a Moscú, el opositor adfirmó que no sentía "ningún dolor", aunque "sabes que estás muriéndote".

Navalni siempre se ha mostrado agradecido a los médicos alemanes, algo que ha hecho extensible a los políticos de este país, que han redoblado su presión a Rusia para que ofrezca una explicación clara de lo ocurrido. La canciller, Angela Merkel, visitó a Navalni cuando aún permanecía ingresado en el hospital Charité.

Tras el mensaje de Navalni contra Putin, el portavoz de la Presidencia de Rusia, Dimitri Peskov, rechazó las acusaciones del dirigente opositor y las calificó de inaceptables y no tener fundamento.

"Creemos que tales acusaciones contra el presidente ruso son absolutamente infundadas e inadmisibles. Además, consideramos algunas de estas declaraciones en la publicación mencionada como totalmente insultantes e inaceptables", indicó ?eskov, según informa la agencia de noticias rusa Sputnik.

Según este portavoz ruso, el dirigente opositor ruso sobrevivió porque le salvaron la vida "precisamente en Rusia" y le ha acusado de trabajar siguiendo "instrucciones" de agentes de la Agencia Central de Inteligencia de Estados Unidos (CIA).

Por su parte, el presidente de la Cámara Baja del Parlamento de Rusia (Duma), Viacheslav Volodin, ha reaccionado a la acusación de Navalni llamándole "sinvergüenza" y "canalla" y ha subrayado que el mandatario ruso le salvó "la vida".

Aumenta las pruebas contra el Kremlin

Mientras tanto, un equipo de expertos en armas químicas del Servicio Federal de Seguridad de Rusia (FSB, antiguo KGB) está implicado en el envenenamiento en agosto pasado del líder opositor ruso, Alexéi Navalni, que además pudo sufrir otros intentos de asesinato con sustancias tóxicas, según una investigación periodística publicada hoy.

El medio digital Bellingcat y sus socios 'Der Spiegel' y CNN afirman que en 2017, 2019 y 2020 operativos del FSB de una unidad clandestina especializada en el trabajo con sustancias tóxicas siguieron a Navalni en sus viajes por Rusia, coincidiendo en 37 ocasiones en los mismos destinos.

"Es también posible que hubiera intentos anteriores de envenenar a Navalni, incluido en la ciudad de Kaliningrado, en el oeste de Rusia, solo un mes antes del casi fatal envenenamiento con Novichok en Siberia", ha afirmado Bellingcat, un portal especializado en investigaciones con fuentes abiertas y datos de redes sociales que anteriormente desveló la participación de militares rusos en la guerra en el este de Ucrania.

La investigación conjunta sobre el envenenamiento de Navalni identifica a tres agentes de la unidad clandestina que viajaron siguiendo al opositor ruso hasta la localidad de Novosibirsk y, desde allí, hasta Tomsk, donde fue envenenado.

Bellingcat ha señalado que los agentes que viajaron siguiendo a Navalni hasta Siberia fueron Alexei Alexandrov e Ivan Osipov --los dos médicos-- y Vladimir Paniaev. Estos tres agentes tenían el apoyo y estaban supervisados por "al menos" otros cinco agentes del FSB, algunos de los cuales viajaron a Omsk, donde se encuentra el hospital ruso en el que el opositor quedó ingresado en coma tras sufrir un colapso en pleno vuelo desde Tomsk con destino a Moscú el 20 de agosto.

Las comunicaciones entre los agentes del FSB que seguían a Navalni registraron "varios picos" justo antes del envenenamiento y cuando el dirigente opositor ruso salió de su hotel para dirigirse al aeropuerto de Tomsk, donde cogió el avión que finalmente tuvo que desviarse para evacuarle de emergencia a un hospital.

Bellingcat ha destacado que su investigación ha desvelado "datos" que apuntan a la "existencia de un programa clandestino de armas químicas gestionado por el FSB". "Tanto los registros de datos telefónicos como los registros de empleo muestran que este programa lo desarrolla de forma encubierta una unidad del FSB que oficialmente tiene el cometido de realizar investigaciones forenses de actos terroristas y prevención de delitos de alta tecnología", ha indicado.

La orden de envenenar a Navalni llegó desde el Kremlin

Además, el portal especializado ha señalado que sus indagaciones han descubierto "telecomunicaciones y datos de viajes que sugieren encarecidamente que el intento de envenenar a Navalni fue ordenado en los más altos niveles del Kremlin".

Bellgincat ha hecho hincapié en que su investigación es "particularmente importante" porque ningún país ha abierto una investigación para aclarar el envenenamiento de Navalni, a excepción de Rusia, a la que sitúa como "el país implicado en el intento de asesinato" del dirigente opositor.

Tras señalar que los datos analizados muestran que Navalni ha estado sometido a seguimiento por parte de agentes de la unidad clandestina del FSB "durante años", ha asegurado que los miembros de este grupo se comunicaron con "expertos en toxinas de organofosfato" en las "semanas previas al viaje de Navalni a Siberia en agosto de 2020 y le siguieron "intensamente" en ese viaje.

Por último, ha señalado que el grupo de agentes encargado de seguir a Navalni trabaja bajo la cobertura del Instituto de Criminalística del FSB, también conocido el Instituto de Investigación II o como la Unidad Militar 34435.

Navalni apunta al FSB

El opositor ruso también ha señalado al FSB como responsable del envenenamiento, presuntamente ordenado por el presidente de Rusia, Vladimir Putin, según sus palabras.

Según ha explicado en un vídeo difundido a través de YouTube, el equipo del FSB habría intentado envenenarlo al menos otras dos veces, que no tuvieron éxito porque la dosis de Novichok era muy pequeña.

Además, ha detallado que el FSB tenía que ser cuidadoso porque una muerte instantánea habría sido muy fácil de investigar. Para apoyar sus aseveraciones, Navalni ha aludido a registros telefónicos y de pasajeros de la aerolínea en la que viajaba.