La prueba proporciona datos sobre la presencia del virus en tiempo real, lo que hace posible diagnosticar con precisión a un infectado pese a que los síntomas se manifiestan solo aproximadamente en 1 persona de cada 5.
Las primeras muestras de la prueba ya han sido enviadas a Brasil, el país más afectado por el virus. Se estima que el número de casos en ese país sudamericano alcanza 1,5 millones de personas.