Un albañil ha decidido tomarse la justicia por su mano y demoler la casa que él mismo había reformado después de que los dueños del inmueble se fueran de vacaciones después de negarse a pagar por las obras.
Tras una fuerte discusión con el propietario de la vivienda en la localidad de Leicester (Inglaterra), el obrero acudió iracundo al domicilio que él mismo había remodelado para proceder a su demolición. Según su propio testimonio, el dueño de la casa había utilizado el dinero que le debía para irse de vacaciones.
Los vecinos no dan crédito a lo sucedido. El pasado martes 8 de junio, el albañil fue visto en la vivienda destruida con la intención de tirar por tierra un trabajo al que había dedicado meses y por el que el inmueble se había revalorizado cerca de 30.000 euros.
Cuando los dueños de la casa regresaron de vacaciones se encontraron con su vivienda completamente destrozada y el jardín lleno de escombros. "Es una pesadilla, contraté al peor obrero de toda Inglaterra"-asegura Mr Kurji, el arquitecto responsable del proyecto.
En declaraciones a medios locales, un vecino relató que pensaba que el obrero había terminado y que por eso estaba retirando el andamiaje. "Me quedé atónito cuando pasé por delante de la casa la semana pasada y vi que el techo había sido arrancado y que la nueva extensión era solo un agujero en el frente de la casa".