El ministro de Asuntos Exteriores haitiano considera la Agenda 2030 clave para el futuro de la Humanidad
"Espero que todos comprendamos la necesidad de acciones concretas"
"Haití no podrá recuperarse sin un apoyo sustancial y sostenible"
El ministro de Asuntos Exteriores de Haití, Bocchit Edmond, ha afirmado durante su intervención en la Asamblea General de la ONU que el futuro de la Humanidad depende de la plena aplicación de la Agenda 2030, "si no lo conseguimos, puede que nunca veamos el mundo que los pueblos de las Naciones Unidas llevamos tiempo pidiendo". "Es absolutamente esencial relanzar la responsabilidad colectiva y seguir movilizados en torno a la Agenda de Desarrollo Sostenible, así como con los objetivos de la Carta de las Naciones Unidas", ha aseverado Edmond.
"Espero que todos comprendamos la necesidad de pasar de las declaraciones solemnes a acciones e iniciativas concretas para dar respuesta a los desafíos presentes y futuros", ha agregado refiriéndose al proyecto elaborado por Naciones Unidas para abordar el cambio climático y reducir la pobreza y el hambre en el mundo para 2030. Por otro lado ha mostrado su preocupación por el número y la magnitud de los incendios forestales en los últimos años y ha recordado los daños causados por el huracán 'Dorian 'en Bahamas.
MÁS
Tras hablar sobre las inundaciones en Haití, el ministro de Asuntos Exteriores de este país ha pedido a la comunidad internacional que preste especial atención a los pequeños estados insulares en desarrollo que carecen de los medios adecuados para combatir los desastres naturales y preservar el medio ambiente.
Asimismo ha expresado su preocupación en relación a la lucha contra la pobreza, alegando que los esfuerzos realizados hasta ahora "no están a la altura" de las necesidades reales y que existe una "brecha notable" entre los compromisos contraídos y lo que se ha logrado. Por otro lado ha destacado la importancia de apostar por una educación de calidad como única forma de garantizar el respeto de los Derechos Humanos y el progreso económico y social.
En este sentido, ha destacado que el Gobierno de Haití es consciente de su responsabilidad de garantizar la seguridad, la estabilidad y el desarrollo a largo plazo del país, y ha recordado que Haití se ha enfrentado durante varios meses a una "crisis política compleja", agravada por una crisis económica. Aún así ha alabado los esfuerzos del mandatario haitiano "a la hora de entablar un diálogo nacional para resolver la crisis". Sin embargo, ha advertido que "Haití no podrá recuperarse sin un apoyo sustancial, sostenido, sostenible, coherente, bien coordinado y eficaz de la comunidad internacional".
Por ello ha pedido "una mejor coordinación de la presencia de la ONU" en el país, y que todas sus acciones "encajen bien" en el marco de las prioridades establecidas por el Gobierno. Para finalizar su intervención ha abogado por un "nuevo paradigma de cooperación internacional", que implica una reforma profunda de las estructuras de la ONU y su funcionamiento.
En su opinión, Naciones Unidas debería de ser más "flexible, abierta y pragmática" y ha señalado que "la acción responsable y oportuna de las Naciones Unidas podría haber ayudado a limitar los daños y evitar el sufrimiento de la población afectada por la epidemia de cólera". No obstante, ha reconocido los "alentadores avances" en la lucha contra la enfermedad a través de los esfuerzos del enviado especial del secretario general y de todos los actores pertinentes. Aún así ha instado a Naciones Unidas a redoblar sus esfuerzos para garantizar el control de la epidemia del cólera en el país.