Las fortísimas rachas de viento que hay ahora mismo en California están complicando, aún más, la delicada situación de la ciudad de Los Ángeles que se encuentra en el peor escenario posible. Ya hay más de 160 kilómetros arrasados. Todavía hoy continúan los rescates y, sobre todo, esa lucha incansable contra las llamas.

La situación va de mal a peor. Los fuegos siguen sin estar controlados en su mayoría y encima surgen nuevos focos. El del condado de Ventura, al noroeste de Los Ángeles, ha comenzado hace apenas unas horas.

Pero lo que hace que la alerta roja se mantenga y que el escenario sea calificado de "especialmente peligroso" es la previsión de los vientos. Los meteorólogos anuncian para hoy y mañana ráfagas que pueden superar los 100 km por hora. Una auténtica pesadilla para los miles de bomberos que luchan contra el fuego en California. Más de 15 mil hectáreas han ardido. 24 personas han muerto y una veintena siguen desaparecidos.

También preocupan los saqueos. Las cámaras captan a un grupo de encapuchados entrar a robar en una mansión desalojada. Los detenidos por intento de robo desde el inicio de los incendios superan los 40. "Serán castigados con la máxima dureza" decía el fiscal de los Ángeles mientras el presidente Joe Biden hablaba de los miles de millones de dólares que harán falta para la reconstrucción.

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