La caída de Damasco en manos de los rebeldes sirios y la huida de Bashar al-Assad a Rusia está provocando reacciones en todo el mundo, Desde Estados Unidos, tanto Joe Biden, como Donald Trump, el presidente electo han expresado su visión sobre el derrocamiento del dictador sirio que gobernaba desde hacía más de dos décadas. Ambos, con visiones distintas de lo que está ocurriendo en Siria.

Donald Trump ha asegurado que Al-Assad ha huido del país, porque ya no contaba con el apoyo militar de Rusia. Para el presidente saliente, Joe Biden, la caída del régimen ha sido un acto de justicia. Estados Unidos ha pedido a sus ciudadanos que abandonen el país ante la incertidumbre de alcanzar una situación más violenta en Siria.

Biden, sin embargo, ha alertado sobre el futuro de Siria, ahora en manos de los rebeldes conformados por fuerzas variopintas, entre los que se encuentran grupos islamistas, vinculados al yihadismo. "No se equivoquen, algunos de los grupos rebeldes que derrocaron a Assad tienen su propio historial sombrío de terrorismo y abusos de los derechos humanos", ha advertido el demócrata.

Estados Unidos tiene en vigor una recompensa de 10 millones de dólares por la captura del líder del Organismo de Liberación del Levante (considerado grupo terrorista por Washington), Abu Mohamed al Julani, que ha entrado triunfante en Damasco al frente de los rebeldes.

El presidente dijo que Estados Unidos mantiene su presencia militar en Siria (unos 900 soldados en la triple frontera entre Siria, Jordania e Irak) para asegurarse que el Estados Islámico (EI) no resurge en la región.

Estados Unidos, por su parte, trabaja junto a sus aliados en Oriente Medio para "destruir las armas químicas del Gobierno del presidente sirio, Bachar el Asad", y evitar que caigan en manos equivocadas, ha explicado un alto funcionario estadounidense a la prensa.

Esa misma fuente ha explicado que, en los últimos días, el Gobierno de Joe Biden se ha esforzado en vigilar el arsenal químico sirio con el objetivo de impedir un posible uso por grupos terroristas o facciones armadas. 

Trump, por su parte ha mostrado su satisfacción por el derrocamiento del régimen sirio y ha explicado que su aliado, el presidente ruso, Vladimir Putin, ya “no está interesado en protegerlo”.

“Asad se ha ido. Ha huido de su país. Su protector, Rusia, liderada por Vladimir Putin, ya no estaba interesada en protegerlo. No había ninguna razón para que Rusia estuviera allí en primer lugar. Perdieron todo interés en Siria debido a Ucrania, donde cerca de 600.000 soldados rusos yacen heridos o muertos, en una guerra que nunca debió haber comenzado”, ha escrito en redes sociales. 

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