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Los gobiernos de España y Líbano, a través de un comunicado conjunto, instan a Israel a un “alto al fuego permanente e inmediato” que permita restablecer la soberanía libanesa sobre el sur del país y garantizar el retorno de los desplazados por la ofensiva israelí contra el partido-milicia chií Hezbolá.
En su llamamiento, ambos países han condenado además los ataques de las fuerzas de Benjamin Netanyahu contra tropas de la ONU desplegadas en la región (FINUL) y las Fuerzas Armadas del país, al tiempo en que han reclamado “aplicar íntegramente la resolución 1701 del Consejo de Seguridad de Naciones Unidas”, por la que se creó la Fuerza Interina de la ONU en el Líbano.
"Esto supone restablecer la soberanía del Líbano sobre su territorio y garantizar el retorno a sus hogares de los desplazados a ambos lados de la Línea Azul", reza el comunicado conjunto, que es resultado del encuentro mantenido por el ministro de Asuntos Exteriores, José Manuel Albares, con su homólogo libanés, Abdalá Bou Habib, en los márgenes de la reunión ministerial de la Unión por el Mediterráneo (UpM) en Barcelona.
“Los Gobiernos de España y Líbano condenan también los ataques contra el personal médico, instalaciones sanitarias, periodistas y civiles y exigen el pleno respeto del derecho internacional humanitario y de las Convenciones de Ginebra", advierten, sin mencionar expresamente a Israel.
A este respecto, España y Líbano se han emplazado a trabajar juntos para estabilizar la situación en el sur del país y para construir una paz duradera en la región.
En esa línea, el Gobierno de e España ha reiterado su voluntad de seguir contribuyendo a paliar la grave crisis humanitaria en el país y reforzar el apoyo a través de la Cooperación Española, incluido para respaldar la fase de estabilización.
Hasta la fecha, España ha facilitado unos 5,5 millones de euros en Ayuda Humanitaria y aproximadamente 12 toneladas de medicinas y mantas para la población vulnerable.
Este domingo, al menos siete personas murieron por un ataque israelí contra un centro de salud en el Líbano. Entre los fallecidos, tres eran paramédicos y otra era una enfermera.
A través de una entrevista en RNE recogida por Europa Press, Albares ha denunciado que “en estos momentos estamos asistiendo a bombardeos indiscriminados que están matando ya más de 2.500 civiles en el Líbano".
“Eso tiene que parar inmediatamente", ha subrayado el ministro, dejando claro que España va a mantener a los cerca de 700 efectivos que tiene desplegados en FINUL, "porque sigue siendo una fuerza a favor de la paz".
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